Cinecritica: Todo el Silencio

"TODO EL SILENCIO" ("IDEM", MEXICO, 2023) DE DIEGO DEL RIO

Miriam (Adriana Llabres, muy bien) se dedica a enseñar lenguaje de señas a principiantes, a "HOPS" (Hijos Oyentes de Padres Sordos) como ella que necesitan comunicarse con sus seres queridos, en tanto en su tiempo libre ensaya para una obra de teatro donde tiene uno de los papeles principales, tiene tiempo de esparcimiento con su circulo de amigas, además de presumir una relación estable con la complaciente Lola (Ludwika Paleta, esplendida) que es sorda pero oralmente educada, es decir, con la capacidad de leer los labios y expresarse oralmente aunque con el acento notorio en estos casos, parece que su vida va perfecta, se comunica perfectamente con su madre quien también es sorda y en un momento clave le confiesa a su nuevo compañero de trabajo y amigo, Manuel (Moisés Melchor), su madre y tía son sordas, razón por la cual tuvo que aprender el lenguaje que ahora es su vida, Manuel es el nuevo maestro de avanzados y sordomudo de nacimiento, entre ellos dos nace una química que mas adelante Lola envidiara y que despierta cierta desconfianza.

Hasta este momento, antes de los problemas de pareja, la vida de Miriam es idónea, tiene un trabajo donde es querida y respetada, relaciones familiares sanas, amigas fieles y una amorosa pareja, pero parece haber momentos donde pierde un poco el sonido, ciertos instantes escucha a los demás bajos o lejanos, y cuando Lola batalla para entender a una barrera con cubrebocas, ella también enfrenta el mismo dilema, en su cita con el otorrinolaringólogo el medico le dice que esta avanzando mucho, que tiene que hacerle estudios, en tanto ella solo sonríe nerviosa y dice que no puede ser, a partir de este momento sabemos lo que le sucede a Miriam, así como ella también es consciente de ello, pero incapaz de aceptarlo, así que se guarda esa preocupación para si misma y sufre en silencio, mientras somos testigos de lo que esta sufriendo, ese pitido final que lastima, esos sonidos que culminan en dolores intensos e insoportables, esos momentos donde de plano como Miriam no escuchamos nada, y como ella sentimos la angustia y desesperación que la embargan.

Todo esto logrado por un manejo del sonido soberbio, donde el director nos pone en sus zapatos para con un simple movimiento de cámara retomar el sonido natural que si escuchan los demás, de esta manera tenemos las dos versiones, la del sonido que escuchamos la mayoría, y la del silencio del titulo que nos desespera a más no poder, y si es así para nosotros que solo lo vivimos unos segundos debe ser un infierno para la protagonista que ya con los estudios en mano recibe una noticia que es incapaz de asimilar, así que el director nos presenta el viaje de esta joven en su perdida de la audición, usando de formidablemente el sonido, y más importante aun, su reacción ante ello, que va de los llantos silenciosos, la soledad constante y la desesperación, para culminar en un cambio total en el trato con los demás, desde el desinterés por su nuevo amigo, la desesperación que ahora le causa salir con su grupo, la frustración que saca con cierta alumna estancada, y las peleas con su pareja porque se siente - ahora si - alejada de ella.

Miriam se convierte poco a poco en la peor versión de si misma, una mujer frustrada que no se siente cómoda en sus clases, incapaz de aceptar su realidad, negando a aceptar su condición, culpando a los demás - "no se te hace que habla muy bajito" -, y reclamando a todos sin que estos tengan ni idea de que le sucede, sumado a esos momentos insonoros donde vivimos el infierno personal de la protagonista - ese baile a lo loco en la discoteca -, y con una dirección que no parece novel, con paneos y tomas largas que lo mismo usan cámara al hombro o fija, y en especial esa escena de la pelea usando los espejos, son momentos que elevan la cinta, como lo hace también su reparto con bienvenidos cameos y dos protagonistas formidables, Paleta es toda una sorpresa, a final uno sabe que por más que la allá acompañado, solo Miriam sabe que esta viviendo, así que cuando va al puente no sabemos si va a tirarse o convencerse de lo bueno de su nuevo mundo, pero si estamos seguros de lo que quiere decir esa frase lapidaria final - "no te escucho nada" -.

Calificación: Muy Bien