Cinecritica: Siempre Sabre los que Hiciste el Verano Pasado

"SIEMPRE SABRE LOS QUE HICISTE EL VERANO PASADO" ("I'LL ALWAYS KNOW WHAT YOU DID LAST SUMMER", ESTADOS UNIDOS, 2006) DE SYLVAIN WHITE

Si bien "Se lo que Hicieron el Verano Pasado" y "Todavía se lo que Hicieron el Verano Pasado" no son grandes - ni siquiera buenos - exponentes del genero slasher, si lograron gran éxito en su momento, se hicieron conocidas y populares, y lanzaron a un estrellato que nunca capitalizo a la jovencísima y preciosa Jennifer Love Hewitt, amor platónico de miles de pubertos y jovencitos, y debo confesar, poseen cierto encanto copiado de la mucho mejor saga "Scream", por lo que uno no entiende porque salió esta secuela directa a dvd con un nivel ínfimo que incluso se nota en la fotografía que no pareciera ser del año en que se filmo, sino más vieja que las primeras dos, lo de no se entiende es un decir claro, ya que después del éxito económico del díptico ¿por que no ganar más dinero con una tercera entrega?

El problema no es que sea una copia descarada de la primera, con todo y escenas y diálogos copiados, sino que a pesar de eso traiciona el espíritu de aquellas, ya que deja el realismo de un asesino desalmado y sádico, por un reemplazo sobrenatural que no tiene nada de sentido, y que ahora si puede servir como excusa para realizar secuelas inacabables de estas cintas, la trama va sobre un grupo de amigos que están hablando sobre el asesino del garfio, que en su momento causo tantas muertes a un grupo de adolescentes con su edad, en eso son atacados de la nada por el asesino del garfio y la gabardina impermeable, que culmina con el fallecimiento de uno de ellos, pero en realidad todo es una broma de los chicos, que ven con espanto como todo ha terminado tan mal.

Deciden guardar el secreto para no truncar su futuro, y un año después son acosados por el asesino que se esconde en ese disfraz, con todos dañados por la culpa, mientras los va liquidando uno a uno, es decir, seguimos el mismo modus operandi de las anteriores, pero aquí el suspenso, o por lo menos la incógnita de quien se esconde en el disfraz es menor, ya que nadie le cree a Amber (una sabrosa Brooke Nevin), y cuando descubren que es verdad no tienen ni chance de desconfiar entre ellos, ya que los va asesinando rápidamente y con todos en pantalla, por lo que esta claro que no es ninguno de ellos, ni el patán de instituto Colby (David Paetkau), ni el simpático migajero Lacen (Ben Easter), ni la cantante Zoe (Torrey DeVitto), ni el atormentado alcohólico Roger (Seth Packard).

Vamos que ni los supuestos sospechosos, dos policías del pueblo, parecen ser los asesinos por lo obvio que seria, y cuando se descubre quien es, resulta una chapuza total (el fantasma vengativo e invencible del pescador original supongo), así que, si para este momento se había soportado la fotografía cutre, los efectos fallidos, el sonido estridente para asustar, las actuaciones mediocres, los sustos que nunca dan miedo, la falta de violencia, y esa edición tipo "Saw" que da cringe y aquí funciona todavía menos que en aquellas, esto hará que uno termine rindiéndose, por ser no solo una mala secuela, sino una mala película en general, por más que se esfuerce la potable Nevin que aun así no es Love Hewitt.

Calificación: Pésima