28 junio 2025

Cinecritica: Exterminio: La Evolución

"EXTERMINIO: LA EVOLUCION" ("28 YEARS LATER",  REINO UNIDO, 2025) DER DANNY BOYLE
Han pasado 28 años - "28 Days Later" - desde el inicio de la infección de zombis iracundos que corren, gritan, saltan y vomitan que destruyeron Reino Unido y terminaron contaminando Paris al final de la notable secuela - "28 Weeks Later" -, pero aquí parecen decirnos que nos olvidemos se esa segunda parte ya que le virus solo afecto la gran isla, mientras todos los demás siguen viviendo tranquilamente, solo enviando soldados para checar que no se salgan de los lugares infectados, en esta nueva actualidad británica el chamaco de doce años llamado Spike (Alfie Williams) esta a punto de evaluarse como cazador de infectados para poder graduarse como adulto, para esto cuenta con el apoyo total de su parlanchín padre Jamie (Aaron Taylor-Johnson) quien se nota ama mucho al pequeño, ellos viven en una alejada comunidad isleña que se conecta con el continente por medio de un banco de arena - un camino - que solo es accesible con la marea baja, padre e hijo viajan al lugar para que su chico "se vuelva un hombre".

Esto sirve no solo para mostrar como han sobrevivido y evolucionado (¿o involucionado?) las sociedades británicas, sino para mostrar como los mismos infectados han evolucionado también, por lo que ahora no solo tenemos a los zombis velocistas de las primeras cintas, ya que también tenemos a unos gordos que cual gusanos se arrastran torpemente por la tierra devorando lombrices, y a los "alfa", unos infectados gigantescos, que además de ser más inteligentes tienen la capacidad de controlar a los normales y aguantar muchísimo castigo antes de morir, además de que al parecer ahora pueden embarazarse, o quien sabe, lo cierto es que esto no se entiende, esta primera parte, con el padre y el hijo sobreviviendo en un ambiente post-apocalíptico hostil, es de lo mejor de la cinta, y lo que mejor converge con lo que habíamos visto antes, la tensión de escapar, de sobrevivir a como de lugar, y el terror que causa esa gigantesca sombra desde su aparición logran que uno disfrute con las palomitas y el refresco gigante.

Con todo y trepidante cierre final que nos mantiene al borde del asiento y expectantes de como se salvaran ese par de supervivientes, el problema viene después, cuando la historia intenta tomar ese drama familiar que si funcionaba en las otras películas, pero que aquí esta metido a destiempo, y a la fuerza, esta saga siempre ha tratado de la familia y la maldad humanas, pero ahora se ha dejado de lado el pesimismo y el cinismo para apelar al dramatismo extremo, que si el padre protector le desespera la esposa enferma Isla (Jodie Comer), que le pone los cuernos, que el hijo lo descubre y lo amenaza con todo y navaja, que si un medico loco y ermitaño puede curarla, que si la enfermedad la hace desvariar y creer que su hijo es su papa, un exceso de chantajismo que termina molestando porque esta pesimamente metido a la narrativa, además cuando el chamaco lleva a su madre con el medico no se siente que el viaje haya sido peligroso o complicado, un sin sentido tomando en cuenta que el primer viaje más corto estuvo lleno de dificultades.

Además por ahí llega la historia de unos soldados suecos que solo sirven para que el sobreviviente Erik (Edvin Ryding) les salve la vida en un deus ex machina de pena ajena, personaje además insoportable que no aporta nada a la trama, quizá representa la ecpatía de los demás países con Reino Unido, lo que no tiene sentido con las entrevistas de los guionistas Alex Garland y el mismo Boyle, que sostienen que esto es dizque una critica al Brexit, que si no lo dicen nadie lo pillaría, porque las imágenes de soldados medievales no dicen nada en si, pero bueno, por lo menos sirve para el mejor chiste de la cinta, el de los labios inyectados de la novia tuneada, por lo menos esta terrible sección termina para dar parte a la mejor, la sentimental del memento morí, donde el eremita Ian Kelson (Ralph Fiennes) le enseña al niño el valor de esta frase, y que cada vida vale muchísimo, por lo que debe disfrutarla y también aprender a dejarla ir, pero pasando esto de nuevo tenemos otra digresión de tono, que siempre el yodo no servía para nada, y que ahora el pequeño sobrevive con un bebe como si nada, hasta llegar a ese ridículo final tan cacareado. 

Una cinta quebrada, con momentos buenos y otros terribles, pero que nunca sabe que quiere contar y con muchas cosas que no llegan a nada, o que dejan a propósito para su siguiente parte, esto, las incongruencias, las partes de pena ajena como ese parto con sororidad, y la apuesta visual no tan exitosa como creen, la vuelven una cinta disfrutable pero muy lejos de lo que era la saga original. a ver que tal viene lo que sigue, si esto sigue cayendo o si regresamos a la buena calidad, solo queda esperar.

Calificación: Aceptable

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