Desde el primer fotograma vemos a la preciosa Kelly-Anne (Juliette Gariépy, perfecta) en plano cerrado, y luego caminando hasta el palacio de justicia con la memorable banda sonora que acompaña la cinta en momentos puntuales, ahí somos testigos del inicio del juicio del demonio de Rosemont, Ludovic Chevalier (tétrico Maxwel McCabe-Lokos), quien está siendo procesado por secuestro, violación, tortura, desmembramiento, asesinato, yventa de videos snuff en esos cuartos rojos del título - que cuenta el boca a boca abunda en la dark y deep web -, de tres adolescentes de 16, 14 y 13 años, todas ellas rubias y de ojos azules, es así que tenemos una escena ininterrumpida (de más de 20 minutos) donde vemos la entrada de los familiares, el acusado, la presentación de una inteligente fiscal y el cinismo del abogado defensor, que puntualiza una y otra vez que debe ser encontrado culpable más allá de toda duda, para terminar con un acercamiento a la cara de la protagonista, que se mantiene tan estoica como en toda la cinta, pero con esa mirada penetrante qué la caracteriza.
Acto seguido vemos el día a día de Kelly-Anne, como es una super modelo muy cotizada, que se maneja de manera completamente profesional, obsesionada con su imagen y su salud, con intensas sesiones de ejercicios, esto lo realiza los días donde tiene tiempo, ya que desde que empezó el juicio está ahí siempre, los días que se encuentran en sesión, ahí conoce a Clementine (Laurie Babin, muy bien), una groupie del asesino como esas desquiciadas qué admiran a los asesinos seriales, pero con una vuelta de tuerca, la chica esta completamente segura de que Ludovic es inocente y lo están incriminando, ello a pesar de las pruebas casi irrefutables qué existen, por lo que la chica es tomada como desquiciada por todos, pero el detalle está en el "casi", parece no haber una prueba totalmente concluyente para ser encontrado culpable, por lo que el juicio, aunque pareciera que solo es un proceso en realidad es mucho más complicado en su veredicto.
Lo más importante de aquí es el estudio de personaje de Kelly-Anne, mientras que desde un inicio sabemos la postura y deseos de Clementine y todos los demás, la cinta juega con la intriga de saber los deseos y meta de la protagonista, que nunca externa sus sentimientos, pero muestra características que nos hacen conocerla poco a poco, todo ello por medio de detalles, aunque tiene una carrera exitosa esta no parece darle un grado de felicidad, aunque si adora aparecer en portadas y fotos al grado de guardarlas como trofeos, esto demuestra su gran ego y vanidad, no tiene deseos banales ni le importan los lujos, es capaz de dejar su lujoso departamento y dormir en la calle sin que le implique un esfuerzo, evita a los demás y sus interacciones son secas, es fría y calculadora, con la Inteligencia para modificar una inteligencia artificial y características de hacker, y lo más demostrativo, ama desplumar a sus contrincantes en el póker en línea.
La fotografía es fría y seca, llena de colores grises que hacen hacer vibrar la pantalla cuando aparece un color, especialmente ese rojo de los videos snuff, el sonido esta muy cuidado, logrando una atmósfera tensa en todo momento, y la banda sonora explota de manera fascinante en los momentos adecuados, en tanto algunos planos y tomas experimentales realzan el viaje psicológico de su protagonista y de nosotros mismos, hasta el vestuario tiene un fuerte simbolismo, con la complejidad y fuerza de la protagonista representado en su ropa, y la sencillez de Clementine, representando lo cerrado y corto, de pensamiento y personalidad. Desde el inicio de la cinta se mencionan dos videos, de dos víctimas, por lo que se presupone existe uno más, uno que obsesiona a Kelly-Anne, y que forma parte crucial de esa parte final que deja a uno totalmente perturbado, todo sin mostrar violencia gráfica, ni siquiera una gota de sangre, hace que uno lo imagine, lo que resulta aún peor, desde la mitad de la cinta la trama empieza a mostrar su verdadera cara, después de poner todas las piezas en el tablero, y de aquí en adelante ya nunca se detiene.
Una exasperada Kelly-Anne decide abrirle los ojos a Clementine, y con ello vemos su verdadera personalidad, tan llena de capas, y todas las decisiones que toma a partir de aquí para encontrar el último video mientras es perseguida por la policía, notando a la madre de una de las victimas, dándose a notar con el asesino en una escena que se quedara en mi mente de por vida con esos gritos súbitos acompañados de banda sonora, la mirada y saludo hitchckokiano del asesino, y un clímax final que demuestra que si tiene sentimientos, dolor (esas lagrimas al perderlo todo), tensión, y que esgenuinamente emocionante con ese juego de póker de ricachones y la subasta entre ricos por el video, al final por fin vemos vivir a la protagonista en medio de un estallido de rojo, y de paso tomar una decisión que muestra la complejidad de la mente humana, y sellando su destino anunciado como lady Shalott -algo de lo que esta consciente con su nombre de usuario y las pinturas en sus pantallas-, al final Kelly-Anne le demuestra a su ídolo que esta a su nivel o por encima de él, y a nosotros qué no estamos tan lejos de ella, en ese morbo cronenbergniano qué nos critica a la cara con ese inolvidable y devastador fotograma final.
Calificación: Notable







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