Cinecritica: El Apóstol

EL APÓSTOL (APOSTLE, REINO UNIDO - EU, 2018)

En 1905 el vagabundo Thomas Richardson (un comprometido Dan Stevens) es requerido por su padre para que salve a su hermana Jennifer (Elen Rhys) de un tenebroso culto en una isla que vive oponiéndose a la corona, los tipos desean cobrar un rescate pero como seguramente al tenerlo lo matarían necesitan que Thomas se cuele en el lugar como uno de ellos, ahí el huraño tipo conoce las tradiciones de los lugareños que pelean por una especie de sociedad comunista donde todos sean iguales y que tienen que donar sangre para tener contenta a la deidad que los protege, casi todos los residentes parecen tener lavado el cerebro, los únicos que salen un poco de ovejas sin pensamiento propio, son los dos jóvenes enamorados Jeremy (Bill Milner) y Ffion (Kristine Froseth) que se ven a escondidas, y la doctora Andrea (Lucy Boynton, bellisima como de costumbre), todos ellos hijos de los tres fundadores de la secta; el devoto Frank (Paul Higgins), el violento Quinn (Mark Lewis Jones), y el labioso profeta Malcolm (Michael Shenn, bastante bien).

Por supuesto nada de lo que sucede ahí es normal, las personas tienen que acudir al llamado de las misas, obligados a entregar sangre en una botella todas las noches, y no salir despues del toque de queda en cuanto comienza la noche, Thomas busca a su hermana raptada en el lugar mientras se medica para bloquear su oscuro pasado que lo ha llevado a perder la fe, por otro lado los tres fundadores de la secta tienen una relación cada vez mas tirante, los espías de la corona llegan a querer detener todo, y una extraña figura se puede ver en los alrededores casi deambulando a Thomas. Con todo esto queda claro que estamos ante una de esas cintas que tan bien les salen en Reino Unido, sectas que adoran a deidades paganas que poco o nada tienen de cristianas, con unos seguidores obsesivos y una violencia que nadie parece ver como lo que es.

Así con un inicio que nos cuenta un tensionante thriller sobre un hombre que intenta rescatar a su hermana vamos pasando a una desquiciante cinta sobre sectas que nos pone los pelos de punta, y finalmente a un incomodo final que coquetea con el gore donde todo se desquicia a un grado tal que todo parece increíble pero congruente dentro de su universo, el director gales Gareth Evans escribió y filmo una cinta deudora de los mejores exponentes de su subgénero pero que tiene identidad propia, técnicamente impecable, la fotografía, maquillaje y en especial la banda sonora es impecable, bien actuada, bien dirigida y con una valentía que no teme caer en el ridículo, sobre un hombre que se enfrenta a mal, no uno sobrenatural, sino al mal intrínseco del hombre y por ende mas peligroso, y que en el trayecto recupera su fe cuando comprenda esa horrible verdad/bendición que es el libre albedrío, desde esta esquina uno espera su siguiente cinta y no queda mas que revisar su obra anterior.

Calificación: Bien