12/12/23

Cinecritica: Nadie

"NADIE" ("NOBODY", EU, 2021) DE ILYA NAISHULLER
Hutch (Bob Odenkirk con un carisma impresionante y una entrega física sorprendente) es el nadie del titulo, el don nadie, un trabajador americano serio, gris y aburrido que trabaja en la empresa de su suegro, tiene menos éxito que su mujer, y pierde el camión de la basura cada martes, de hecho en un muy inteligente montaje se nos muestra su vida cotidiana en forma de viñetas que repiten lo que hace día tras día, de tal manera que enseguida comprendemos que todos su días son iguales, es decir, que el buenazo de Hutch esta atrapado en una rutina en la que lo más "interesante" no sacar la basura a tiempo, ademas es maniatado por todos en su casa, y su esposa (Connie Nielsen) tiene una almohada entre ambos en la cama, en medio de esa rutina unos tarados ladrones entran a su casa con pistola en mano y se llevan unos cuantos dolares y un reloj, pero cuando el hijo de Hutch (Gage Munroe) ataca a uno de ellos simplemente pide que lo suelte para terminar de ser robados sin mayor peligro, pero esto hace que tanto su hijo como su mujer pierdan el poco respeto que le guardaban, e incluso la policía le tiene cierto reclamo ante su pasmo en esa situación.

El día siguiente recibe bullying de un vecino presumido, de un cuñado que se cree macho alfa y hasta algo de condescendencia de su suegro (Michael Ironside, desperdiciado), todo esto causa que Hutch explote cuando la pulsera de gatito de su hija (Paisley Cadorath) no aparezca y vaya tras los dos maleantes, pero como no resultan ser más que dos latinos lastimosos el tipo no sabe como desatarse, hasta que como el mismo dice, Dios no cierra una puerta sin abrir una ventana, esto en forma de unos mafiosos rusos que entran en el autobús donde va para aprovecharse de una chica que viaja sola, así que con la certeza de que la chica llegara a salvo y esperando que a esos patanes les guste la comida de hospital comienza una pelea tan física y dolorosa que resulta ser lo más brillante del filme, chingazos, patadas, navajazos, cinturones, relojes, ahorcamientos, huesos quebrados, atravesamientos de ventanas y
hasta traqueotomías hacen de lo que vemos un lujo, ademas de que a partir de esto momento la cinta cae en una vorágine de violencia que se agradece, en especial por su decidido humor negro y su desatada carnicería.

Siguiendo la estela de la saga "John Wick" y "Atómica" tenemos peleas y balazos coreografiados, pero esta vez con menos baile y más físico, aquí los golpes se sienten, la sangre se ve, los moretones aparecen, en una apuesta muy entretenida y arriesgada porque la cinta defiende el tan acabado machismo ¿un hombre puede negar su violencia de forma total negando su naturaleza? ¿para una mujer es atractivo un hombre que no puede darle seguridad no defenderla? más allá de las impecables coreografías y la impecable mano del director para la puesta en escena la cinta pone sobre la mesa temas que no deberían dejarse de lado. Sumado a esto el humor es tan sádico y negro que uno jamas puede tomarse la cosa en serio, a final de cuentas es la fantasía de un hombre hastiado de su vida familiar aburrida, que se siente psicológicamente castrado y que quiere ser John Wick pateando traseros, salvando a su amor, ganándose el respeto, y desapareciendo malvados del mundo mientras recibe castigo, y con un reparto de lujo (Christopher Lloyd brilla), un soundtrack extraordinario, y algunas escenas de antología - un desatado Aleksey Serebryakov cruzando la calle para bailar y cantar en un escenario en un plano secuencia genial es un ejemplo - esa fantasía no solo se entiende sino que termina deseándose, fuck yeah.

Calificación: Muy Bien

No hay comentarios: