Cinecritica: Tarzán en New York

TARZÁN EN NEW YORK (TARZAN'S NEW YORK ADVENTURE, EU, 1942)

Solo un año despues llegaria la sexta entrega de Tarzan por parte de la MGM y otra vez con Richard Thorpe en la silla del director, ya en la anterior se notaba que el director le habia encontrado el punto al personaje y quizá por ello intento algo distinto lo cual se agradece ya que era difícil rebasar lo logrado en la cinta anterior viendo las limitantes, la cinta es agil y apenas dura mas de una hora en la cual pasamos por diferentes escenarios y tenemos hasta alegatos legales, con un tono cómico mucho mas marcado y con Cheeta en una escena si y la otra también es claro que es una apuesta diferente, quizá todavía mas familiar que las anteriores pero con un inicio algo fuerte y tocando temas interesantes, si ademas de eso vemos a Johnny Weiimüller haciendo acrobacias en los rascacielos y tirándose casi de lo mas alto del puente de manhattan, no se puede pedir mas.

En la selva vive la idílica familia pero llega una expedicion a cazar animales para llevarlos a un circo, los villanos ven que los elefantes hacen lo que les indica el pequeño Boy (Johnny Sheffield) y despues de ciertas situaciones casi matan a Tarzán (Johnny Weissmüller, el mejor tarzan que ha existido) y Jane (Maureen O'Sullivan, sin duda la mejor Jane y tan exquisita como siempre) pero Cheeta los salva de morir quemados, ahi descubren que un Boy engañado fue raptado y llevado a New York, la pareja lo sigue hasta alla y lo encuentra en un circo, deciden hacer las cosas de forma legal pero el hábil abogado de los mafiosos gana por un tecnicismos, Boy no es el hijo sanguíneo y nunca lo adoptaron formalmente, asi que Jane le dice a Tarzán que sea el mismo por lo que lo vemos escapar de la policía por los rascacielos, correr por las calles brincando por los carros y tirándose de un puente hasta el enfrentamiento final donde todo se resuelve.

Claro que al final si resulta un poco ñoño eso del juez cambiando de parecer pero bueno, en plena epoca del código moral y tratándose de una cinta familiar era difícil meter que la justicia no funciona, lastima porque el coqueteo con el manejo maquiavelico de los abogados es bueno, y siempre es interesante ver a Weissmüller con traje, es una imagen impensable y atípica, lo demas lo típico, el malo muy malo, el que se arrepiente y el que siempre fue bueno, el reparto es mas que bueno, y ademas es la despedida de O'Sullivan del personaje y de la epoca de oro de la saga, tengo entendido que despues de esto ya no se logro ni siquiera algo parecido, quizá tampoco hasta la fecha como anotare en otras dos revisiones mas actuales.

Calificación: Palomera