24 diciembre 2025

Critica: La Muerte de Dos Amantes

"LA MUERTE DE DOS AMANTES" ("THE KILLING OF TWO LOVERS", ESTADOS UNIDOS, 2020) DE ROBERT MACHOIAN
Un hombre aparece en pantalla, se ve nervioso pero decidido, porta un arma que apunta hacia algún lugar mientras una mueca se dibuja en su cara, una de puro sufrimiento, aunque no sabemos porque, rápidamente nos enteramos que le está apuntando a una mujer dormida junto a un hombre, le apunta a ella y al parecer no se atreverá a disparar, pero apunta hacia el hombre, sentimos la
tensión en el aire, y de pronto se escucha que alguien le bajó a un inodoro en el baño de esa casa, el tipo se asusta y sale por la ventana, se va caminando como disimulando, y luego trota mientras esconde la pistola, hasta llegar a una casa apenas unas cuadras de donde estuvo a punto de perpetuar un doble asesinato, corre con la cámara siguiéndole en un estilo cuadrado 4:3 qué nunca se abandona, y una banda sonora estridente y metálica que pone los pelos de punta, la cinta comienza, sin que conozcamos porque dos personas iban a perder la vida sin siquiera enterarse, pero haciendo "casi" honor a ese título tan descriptivo, que comprendemos en algún momento llegara, inevitablemente.

Con lo escrito, se podría pensar que estamos ante un thriller de asesinato, o algo tipo policiaco, pero no podría estar más lejos de la realidad, lo cierto es que la cinta escrita, editada y dirigida por Machoian es un oscuro drama sórdido de la América profunda con mucho suspenso, aunque no hay asesino por encontrar, siempre tenemos la tensión por la sensación de que algo está a punto de ocurrir, porque el protagonista David (Clayne Crawford, perfecto) esta cada vez más presionado y atrapado en su dilema moral, y es empujado una y otra vez hasta el hartazgo, de tal manera que solo estamos esperando
que la olla explote, esto por supuesto se ve refrendado por ese formato cuadrado qué nos hace sentir atrapados y acorralados, como si fuéramos el protagonista, por esos desolados parajes de la América profunda, tan llena de carencias y diversión, los caminos planos, las casas sencillas, los llanos interminables, la inagotable nieve sucia, y esas montañas a lo lejos hacen que todo se sienta peor, como si fueran pequeñas hormigas sin saber que hacer mientras Dios mira en los cielos brillantes pero oscuros, y por supuesto, esa banda sonora de Peter Albrechtsen, que más bien son sonidos disonantes metálicos, como si todo el tiempo se estuviera manipulando una pistola, amartillándola, cargándola, presionando el gatillo.

La historia la vamos conociendo de acuerdo a lo que vemos, sin flashbacks ni explicaciones de ningún tipo, solo el día a día de un desesperado hombre solitario que vive en casa de su padre (Bruce Graham), que trabaja en lo que puede, y que persigue insistentemente al tipo que estaba en la cama (Chris Coy) para asesinarlo, es nuestra responsabilidad armar el rompecabezas, que tampoco es tan difícil de unir, por lo menos no en cuanto a lo que desea David, pero si en la complejidad de todo el asunto, y más aun, de la psique del pobre hombre ¿cuerneado? David se ha separado de su mujer Niki (Sepideh Moafi, bastante bien), quien es nada menos que la mujer que quería asesinar, porque en realidad no se han separado, solo se "han dado un tiempo", lo que sea que eso signifique, pero además con el permiso de salir con otras personas, el detalle es que tenemos claro que David no quiere salir con nadie más, ni conocer a otra mujer, el quiere y necesita estar con su mujer y sus hijos, y hace todo lo posible por recuperarlos, ya que eso acordaron, , el tipo solo accedió a las pautas de su mujer porque no le quedo de otra.

Por otra parte, Niki no parece muy interesada en intentarlo, y aparentemente solo lo ve para cumplir ese acuerdo, esto, junto a ese nuevo amante -cuya personalidad descubriremos en una escena cumbre-, y los reclamos de la hija mayor por permitirlo, lo llevarán hasta el límite, en ese pueblo donde todos se conocen y saludan, haciendo que la afrenta sea aún peor, porque esta claro por las pocas conversaciones que entabla el tipo, que todos están al tanto de la situación, de lo que hace su (ex)mujer, y su sufrimiento. 
La trama se va por derroteros inesperados e intensos, mostrando que la complejidad del ser humano es infinita, y donde nada ni nadie es lo que parece, en tanto asistimos a la destrucción moral y espiritual de un hombre que no sabe que hacer, porque su mujer lo manipula y lastima, con otro machito que solo quiere demostrar algo, y su alma rompiéndose a pedazos.

Con momentos tan poderosos como la paliza a un muñeco, un tiroteo en medio de la nada, esa platica con Close ups cerradísimos digresiones con la narrativa empleada, el desternillante momento de los hijos defendiendo el honor de su madre por su padre al destruir ciertas flores hasta no dejar pruebas, las interacciones con los pequeños que ama y lo aman, en especial el de los cohetes que termina de forma dolorosa, esa descriptiva canción a capela, y por supuesto, ese tenso clímax final donde apenas respiramos, nos enojamos, nos emocionamos, porque ya no aguantamos más, estamos como el protagonista, no soportamos más faltas de respeto, más largas, más groserías, más tonterías ridículas, y peor aun, al soportarlas permitimos que lleguen más y más lejos, hasta al punto de poder costarnos la vida, para cerrar en ese epilogo extraño, pero que si uno lo piensa bien no lo es tanto, el amor obsesivo de David solo podía terminar de una manera, y encuentra su peor vertiente, en pocas palabras cine de la mejor calidad realizado con poquísimos recursos, pero muchísimo corazón y talento.

Calificación: Excelente

22 diciembre 2025

Critica: F1

"F1" ("F1", ESTADOS UNIDOS, 2025) DE JOSEPH KOSINSKI
El arrebatado y directo fanfarrón Sonny Hayes (Brad Pitt con un carisma y ángel fenomenal) es cuestionado múltiples veces durante la cinta por su razón para correr, para arriesgar la vida, para seguir dándolo todo en la pista a su avanzada edad, ya que él precisa que no le interesa el dinero, ni la fama, ni los trofeos, ¡vamos! que considera incluso a los fanáticos y a los periodistas como ruido distractor, frente a esta pregunta,
el impasible piloto solo atina a poner mirada pícara y sonreír descaradamente como solo una estrella del tamaño de Pitt puede hacer, más adelante comprendemos porque lo hace, es una razón mucho más interesante y elevada que lo que uno podría pensar, no tiene que ver con fama, ego, ni demostraciones a nadie, es algo incluso espiritual, la búsqueda de una sensación y sentimiento mucho más grande que no puede explicarse, pero que si puede verse representado de forma perfecta por Kosinski y su equipo, en un momento cumbre del filme.

Esto quizá es simbólico para el propio Pitt, ¿para que seguir haciendo cine como productor, buscador de talento y actor en una industria que le dio la espalda? ¿Por que no jubilarse con sus millones y vivir plácidamente? ¿Cómo evitar que le afecten las críticas de las personas que antes lo amaban? La respuesta está en el propio Sonny, un tipo arrogante, vanidoso y solitario, que al mismo tiempo no puede evitar ser atractivo, carismático, encantador e impresionante, y que solo corre porque ama hacerlo, a pesar de que la prensa lo desprecia y la gente lo ataca, es decir, es el mismo Brad Pitt amado por algunos pero vapuleado por otros, mientras él ha aprendido a tomarlo como ruido, y solo hacer lo que ama, para lograr alcanzar esos momentos cumbres, con lo escrito, queda claro que estamos ante una cinta de dos horas y media qué es un vehículo de lucimiento para su super estrella -una de las pocas qué quedan- más que el dizque comercial para este deporte automovilístico.

Uno de los mejores vehículos de este tipo que he visto, y es que nadie mejor que Pitt podría hacer este encantador tipo vanidoso y chulo, que escupe las palabras con sabrosura, y que siempre tiene una sonrisa en el rostro, qué puede ganarse a todos con su humildad y don de gentes, y que como siempre en este tipo de historias, prefiere entrenar de forma natural a esos complejos sistemas tecnológicos, por supuesto tenemos una subtrama qué ataca el capitalismo a modo de intriga política, y le da más potencia al relato, pero lo más importante es ese conocido y usual relato de un deportista piloto/boxeador/corredor/tenista que regresa por sus fueros para demostrar a los demás, y sobre todo a si mismo, que puede dar lo que se suponía que daría cuando era joven, en una última oportunidad donde se topa con más problemas que nunca, pero siendo más maduro para afrontarlos, y donde nos estamos comiendo las uñas al verlo lograrlo.

Sonny Hayes (Brad Pitt, exquisito) es un piloto nómada que compite donde puede y acaba de ganar las 24 horas de Daytona, es contactado por su amigo Rubén Cervantes (Javier Bardem, bien) para que lo ayude a ganar puntos para su escudería en la formula 1, de otra manera lo obligarán a vender por reglamento, Hayes primeramente no acepta, es una locura, pero al final decide intentarlo y enfrentar los fantasmas de un doloroso accidente que le cambió la vida en los noventa, cuando era la promesa de ese deporte, al llegar todos toman esto como una locura, y más por la forma de ser de Sonny, que escupe las cosas sin filtros mostrando los defectos y errores de los demás, en especial gana la animadversión del otro piloto, Joshua (Damson Idris), un tipo serio
y profesional pero arrogante e inmaduro, Sonny tiene pésimos resultados, pero va ganándose poco a poco a todo el equipo, con su profesionalismo, ética profesional, talento natural y una moral capaz de sacrificarse por su compañero, es decir, Sonny es un fanfarrón pedante, pero en el fondo es un tipo de moral intachable que ha rectificado su vida, pero que no quiere mostrar a los demás esta faceta ¿debido a que no quiere esos halagos? A pesar de los malos resultados iniciales, las cosas van mejorando, hace buenas migas con la directora de ingeniería Kate (Kerry Condon, tan bien como siempre), y hasta el respeto/admiración de su compañero de equipo.

Las carreras están filmadas de forma sorprendente, la iluminación, los encuadres, los movimientos de cámara, el montaje, la edición veloz, mostrando las carreras desde fuera, desde la pista, por un lado del automóvil, en la misma cabina, de tal manera que sentimos su estamos ahí, esto apoyado en las gradas, los locutores y las caras del equipo de la escudería, hacen que uno termine genuinamente emocionado por ver lo que sucede en la pantalla, agarrado del asiento, comiéndose las uñas, molesto, feliz, triste, preocupado, y al borde de las lágrimas con ese personaje construido por Pitt qué demuestra fortaleza al mismo tiempo que una sensibilidad gestual, todas las carreras son emocionantes y técnicamente perfectas, y ese final es impresionante, me preocupe, me emocione, sufrí y al final goce con una sorpresa, no es muy compleja en su historia, pero que más da, uno la ve boquiabierto y ríe al mismo tiempo que suelta un suspiro de angustia junto a los demás espectadores, es cine en estado puro, del clásico, como ya solo pueden darnos estrellas como Pitt y Cruise, respaldadas por el talentoso Kosinski.

Calificación: Muy Bien

20 diciembre 2025

Critica: Adolescencia

"ADOLESCENCIA" ("ADOLESCENCE", REINO UNIDO, 2025) DE PHILIP BARANTINI
En el cierre de esta impresionante miniserie de cuatro episodios, el atribulado padre de familia Eddie Miller (el siempre exquisito Stephen Graham) se encuentra llorando desconsoladamente en la habitación de su hijo, en su cama, y le habla al peluche cual
si fuera su pequeño Jamie (extraordinario Owen Cooper), un lo siento hijo, para culminar con un "debi haberlo hecho mejor", es un momento devastador por lo que significa, Eddie al fin acepta lo que era inevitable, y al mismo tiempo toma la responsabilidad que tiene en la situación, dejándolo ir, debido a que no tiene otra opción, es un momento poderoso, catártico, en especial después de ese doloroso último episodio, donde seguimos un día cualquiera, bueno en realidad no tanto, ya que es el cumpleaños de Eddie, pero para todos los demás si, los que lo acosan, los que se burlan, los metiches, los que los apoyan y los que juzgan en todo momento.

Eddie, su esposa Manda (Christine  Tremarco, muy bien), y su prudente hija casi adulta Lisa (Amelie Pease), intentan festejar el cumpleaños pero una serie de circunstancias no se lo permiten, unos delincuentes vandalizan su camioneta, una ida a la ferretería termina de la peor manera posible, y una llamada los hace volver a la terrible realidad, pero al mismo tiempo existen instantes hermosos, como ese recuerdo infantil que cambia el ambiente y el tono con el tema "Take On Me" de A-ha, y esa platica final entre la pareja de esposos, donde salen las ideas, confesiones, torturas internas y conclusiones  que uno mira desencajado, por lo que significan, y por como se realizan, para la llegada de su hija que les da un panorama más amplio e increíblemente maduro para la edad que tiene, no hay nada que hacer, aceptarlo, sufrir las consecuencias, y amar con mucha fuerza a los seres queridos.

Los cuatro episodios nos muestran diferentes puntos de vista en tiempos diferentes, lo que le da a cada uno de ellos un tono particular, pero que encaja perfectamente con el global de la serie, todos ellos están filmados en enfermizos planos secuencias que demuestran una planeación y organización muy quisquillosa de Barantini, como ya lo había hecho en la notable "Boiling Point", así que uno mira este impresionante logro técnico con la boca abierta, y solo puede imaginar lo que se tuvo que ensayar y conjuntar para lograr tal nivel, y en la mayoría de ocasiones da en el blanco, el que no existan cortes, y que la cámara siga sin edición lo que sucede le da mucha potencia al conjunto, en el primer episodio vamos y venimos en ese pandemónium burocrático, en el segundo en una pesadilla escolar aun mayor, y en el último episodio seguimos de manera constante a la familia, como encimosos  voyeristas sin reparo, en el tercero nos centramos principalmente en un solo cuarto con dos personas, pero aún así funciona, por la fuerza de las interpretaciones, y aún viene lo mejor, toda esta perfección técnica no estorba a la narrativa.

En ningún momento el aspecto técnico se pone por encima de la historia que vemos, el guión de Jack Thorne y el propio Stephen Graham, es tan bueno que no nos deja distraernos, y las actuaciones solo hacen que tome más fuerza lo escrito, de Graham no hay nada que decir, se conoce su capacidad, pero todos están a su altura, o casi, y el caso del adolescente Owen Cooper es algo especial, no solo esta a su nivel, sino que él siempre está por encima de los demás, gana los duelos interpretativos, y como en el caso del tercer episodio, se impone a Erin Doherty como la preocupada y curiosa psicóloga de buenas intenciones, , de tal forma que verlo cambiar de tono, pasar de la dulzura a la ira, o de la seriedad al chantajismo se siente completamente natural, su interpretación es extraordinaria, y puede generar genuina compasión, para al minuto siguiente dar un miedo tremendo al mostrar su verdadero rostro.

El primer episodio es el más confuso, pero muy interesante, conocemos los personajes, la situación, y hay una poderosa revelación al final, la policía detiene al pequeño Jamie de 13 años por asesinato, parece un chico frágil y dulce que esta perdido frente a esos cínicos policías, en tanto su familia no tiene idea de que hacer, todo parece un atropello a los derechos e intimidad de una familia, y una exageración contra un pequeño, conforme avanza todo notamos que nuestras predisposiciones son incorrectas, el segundo sigue a los detectives del caso, Bascombe (Ashley Walters) y Frank (Faye Marsay) durante todas las vueltas que dan por la escuela, donde los chicos saben la tragedia que sucedió, pero no podría interesarles menos, están ahí para echar desmadre, reírse de todo, agarrarse a fregazos, estar pegados al celular, y burlarse de los profesores visiblemente rebasados, con algunos de estos a los que de plano les vale madre, e incluso tomando a juego/burla la tragedia que acaba de suceder "¿Te parece que alguien está aprendiendo?" pregunta el detective a su compañera, "parece un maldito corral" se contesta a si mismo.

El tercero es el más tenso y estresante, un duelo entre Jamie y su psicóloga, donde el chico poco a poco muestra su plumaje, mucho más complejo de lo que uno pudiera pensar, ya que aunque ya conocemos la realidad del asunto no queremos creer lo que vimos, como la psicóloga Briony, el chico es demasiado amable y dulce, quizá ni siquiera tiene claro lo que hizo, o tiene algún problema mental, conforme avanza el episodio notamos la astucia e inteligencia del chico, pero también los deslices que tiene, y de los que es perfectamente consciente, el cuarto y último ya mencionado, es un doloroso viaje al centro de una familia destrozada, que todavía no sabe como paso ni que sigue. 
Al final, esta historia no da respuestas fáciles, porque no las hay, ¿Qué razón puede existir para cometer un crimen? ¿De que sirve que descubran porque sucedió? ¿Ello impedirá que ocurran otros? ¿Cómo evitar el bullying normalizado en redes? ¿Existe una manera de recuperar la empatía perdida de la humanidad? 

Queda claro que no, porque ya estamos muy lejos de la nueva realidad, de los más jóvenes, esos que viven principalmente en el internet, en las redes sociales, no conocemos su actuar ni su forma de comunicarse. C
omo se lo deja claro el hijo del detective, el acosado Adam (Amari Bacchus) a su padre cuando le llama para platicar con el a solas - "me dio pena verte tan perdido" - le suelta a forma de sentencia, justo después de explicarle toda la situación, la clave esta en Instagram, pero no saben el lenguaje, él si, y le hace saber que unos simples emojis esconden algo mucho más perturbador y cotidiano, avalado por todos, y tan conocido que causó uno paliza frente a ellos sin que nadie interviniera, un mundo terrible con insultos modernos, con la peligrosa manosfera, y la indiferencia de todo el mundo, el acoso escolar, la persecución, las burlas, y todo un mundo que apenas comprendemos.

Frente a esto el detective al final entiende de que va todo, y se queda para invitar a su hijo a comer, a platicar con él, a interesarse por él, a convivir dándole tiempo, porque esta acaso es la única manera de conocer a los hijos, de ayudarlos, de protegerlos, de quererlos, de entablar relación con ellos para que no desvíen el camino ni se sientan solos, el policía lo entiende y hace lo correcto, mientras la cámara sube al cielo y mira todo desde arriba mientras suena "Fragile" de Sting en la versión de Aaron May y David Ridley, como si Dios viera todo, sufriendo por nuestras acciones, de pronto la mirada/cámara se acerca al estacionamiento donde sucedió la desgracia, vemos a Eddie bajar y dejar unas flores a la víctima mientras su cara esta desencajada, para él es demasiado tarde, pero para algunos de nosotros no...

Calificación: Excelente

19 diciembre 2025

Critica: Estoy Listo, Custodio

"ESTOY LISTO, CUSTODIO" ("I'M READY, WARDEN", ESTADOS UNIDOS, 2024) DE SMRITI MUNDHRA
John Henry Ramírez está a pocos días de su ejecución, de ha librado de ella varias veces con amparos, pero se los ha terminado, y con ello su cruda realidad, en apenas unos días va a recibir una inyección legar y dejar este mundo, en el documental nos enteramos del atroz crimen que realizó para recibir esa condena, asesino a sangre fría a Pablo Castro, con una cantidad increíble de navajazos, conocemos su doloroso pasado con madre abusiva y padre ausente, su pasado en las pandillas enrolado por su tío, su intento fallido de ser marine, y el regreso a las drogas y el crimen, pero nada de esto es lo verdaderamente interesante del documental, ya que no va sobre el pasado o lo que hizo un hombre, sino sobre lo que cambio a partir de esa dolorosa e implacable situación para todos los involucrados.

Ramírez intenta librar la pena de muerte, tiene un hijo adolescente, y se ha volcado totalmente a la religión, uno pudiera pensar que es sencillo viendo su situación, pero sus confesiones, sus pensamientos, sus palabras, parecen ser francas, John desea más el perdón de la familia de su víctima, qué evitar la muerte, y al mismo tiempo sabe que nada de lo que haga o diga vale algo para ellos, como tampoco valdrían para él estando en su situación, los entiende perfectamente, pero quiere pedir disculpas de la manera más sincera, y para mostrar que esto es real tenemos algunas personas que abogan por él, no es la misma persona que asesino y escapó a México durante cuatro años donde se hizo parte de una familia con un hijo que es todo para él, Israel que a pesar de su sequedad comparte el mismo sentir para con su padre.

Pero para los afectados esto no significa nada, Aaron Castro vivió el asesinato de su padre siendo un adolescente, le toco enterarse, correr a ver si era verdad, verlo tirado, y reconocerlo más que nada por la gorra a un lado del cuerpo, él solo quiere justicia, pero ¿será justicia? El documental no intenta manipularnos de ninguna manera, solo muestra las imágenes, con una edición sencilla y prácticamente sin música, solo los pensamientos de estas personas involucradas en esta supuesta práctica de justicia, y uno, de todas formas termina en contra de ella -no puede ser de otra forma si eres católico-, ya sea por el genuino arrepentimiento qué se ve en Ramírez, en el dolor de las personas que lo aman, pero las importante aún, por el sufrimiento de los que deseaban su muerte.

Que van desde la desesperación al no capturarlo, la altanería en las entrevistas para que pague, molestia ante la posibilidad de que no sea ejecutado, el enojo ante su supuesto cambio, la estupefacción al conocer la noticia y saber que no se gano nada, el sufrimiento por la pérdida de una vida, y las arcadas por el estrés del dilema moral, al final todos llegamos a la misma conclusión, la venganza disfrazada de justicia no otorga nada, y el valor de un ser humano es incalculable, ahora solo falta convencer a casi todas las personas que habitan el planeta, este documental es un buen y poderoso inicio, con todo y despedida final a la persona que más se ama, y a la que más se daño, para poder decir "I'm Ready, Warden" con lo que esto conlleva.

Calificación: Notable

18 diciembre 2025

Critica: El Ultimo Pub

"EL ULTIMO PUB" ("THE OLD OAK", REINO UNIDO - FRANCIA - BELGICA, 2023) DE KEN LOACH
En uno de los momentos claves de esta, quizá la despedida de Loach (espero que no), la resiliente refugiada Siria Yara (Ebla Mari, muy bien) esta mirando las fotos que guarda colgadas en cierto cuarto abandonado el solitario Tommy Joe Ballantyne (sorprendente Dave Turner), son de los mineros en plena lucha social, la huelga que Margaret Thatcher aplastó con puño se hierro, causando desde ese momento -no
importa si el gobierno es de derechas o izquierda-, una inequidad social que en la actualidad es grandísima, "se ven fuertes" comenta ella  "lo éramos", responde Tommy "TJ" orgulloso, a lo que suma, "mi padre siempre lo decía, si los trabajadores se dieran cuenta del poder que tienen y tuvieran la confianza para usarlo, podrían cambiar el mundo. Pero nunca lo hicimos", es una declaración de intenciones directa, que resume no solo el alma de esta cinta, sino el de la filmografía de Loach en general, siempre preocupada y pendiente de los problemas de la gente común, de sus luchas, de sus sueños, sus fortalezas y esperanzas.

Aún cuando se suelte en la cinta que la esperanza es una obscenidad, l
a posición de Loach es clara y directa, él está del lado del trabajador común, de la clase media, media alta, baja y los variados tipos de pobreza, de los que luchan, los que sufren, los que ayudan a los demás, de la ayuda comunitaria, del humanismo, de la moral y la ética, y por ende en contra de las diferencias inconmensurables entre clases, el capitalismo, el dinero sobre todas las cosas, los medios de producción sobre el valor humano, las super-empresas, los multimillonarios, el odio, el rencor, la violencia, y en general, de todo el sistema que estamos viviendo, donde por ejemplo en diciembre del 2021 se voto en la ONU para el derecho universal a la alimentación, y solo EU e Israel votaron en contra, los mismos que votaron hace un mes a favor de la tortura junto a Argentina y su impresentable presidente gnomo con peinado distractor.

Por ello su cine es sencillo, directo, tranquilo y sereno, con la cámara apostada de tal manera que olvidamos que vemos una cinta, a lo que ayudan las locaciones reales donde se filma, y la casi ausencia total de banda sonora, lo que casi nos convence de que estamos viendo un documental y no una ficción, o mejor aún, que somos un pueblerino más en ese rincón al norte de Inglaterra, conviviendo con ellos y viviendo todos los percances qué enfrentan estos luchones lugareños. Todo inicia con la llegada de familias sirias qué todavía no sé bajan del autobús, cuando ya son atacadas, ultrajadas, insultadas y amenazadas, por ahí gritan "cabeza de trapo", por allá terroristas, y lo que se les venga a la cabeza, los del pueblo están preocupados por la llegada de ellos, el valor de las casas va a bajar, quizá un loco con una bomba se explote, por sus costumbres distintas, o de plano porque no son de ahí, aunque al que comenta esto le recuerdan de inmediato que el tampoco... Haga de cuenta el discurso rancio del presidente payaso del norte.

Tommy parece más sensible y prudente que los demás, pero evita los problemas, aún así ayuda a la joven Yara, y con el reparto de ayuda que mandan para los sitios, aunque no puede evitar notar que los niños del pueblo son incluso tan pobres como los refugiados, a veces hasta más, y piensa que también deben ayudarlos, así, Yara y Tommy van construyendo una bonita amistad, a pesar de las reticencias del señor, que además lidia con el desprecio de sus clientes ya que es el duelo del bar "El Viejo Roble" del título, aún con todos los problemas, Tommy, con un pasado tortuoso, un presente solitario, y con la única compañía de la carismática perrita Marras (Lola) qué parece haber sido enviada por el cielo, decide hacer lo correcto, sin importar las consecuencias, pero demostrando que la colaboración, solidaridad y humanidad es lo más importante en el mundo, por lo menos si queremos seguir en el, solo podemos hacerlo como equipo, como familia.

Con una escena hermosa en un templo haciendo un llamado a que despertemos, y no permitamos muerte, esta clara la postura de Loach frente a las guerras y masacres como la que ocurre en Palestina, ese comedor comunitario que nos hace un nudo en la garganta, o los momentos de la playa, es imposible no llorar, no es lo que se busca, pero esos fundidos en negro pausados dejan clara la intención del director, quiere que cerremos la escena y la pensemos, que saquemos conclusiones, que pensemos en ser mejores y en que hacer para ayudar, sin poder evitar ese discurso final amargo, donde TJ confiesa que la mitad del país está podrido, que el odio, la mentira, la corrupción y la traición manejan el mundo, donde no dejan ni ayudar a unos refugiados de guerra siendo un supuesto país millonario, donde su misma población no tiene para comer, ni manera de salir adelante, donde él mismo llega a duras penas a fin de mes, donde las familias eligen entre comer o calefacción, qué sufren esa vergüenza, porque no decimos nada, aceptamos todo, "si no pides nada no recibes nada", y esa dolorosa línea final donde nos dicen que hacer "solo no digas nada, cuida de los tuyos" la ley de la selva que nos han obligado a cumplir, olvidando ser humanos y cristianos.

Y esa majestuosa escena en la conclusión, donde Tommy le comenta a un "amigo" que han sufrido mucho, sus padres... ellos... todos... pero eso no comenzó con los sirios sino muchísimo tiempo antes, donde todo comenzó a irse a la mierda, pero siempre hay que culpar alguien por los problemas, y nunca miramos hacia arriba, siempre miramos hacia abajo, a los pobres qué están debajo de nosotros, siempre es culpa del más débil, y es más fácil restregárselo a la cara a ellos, y es verdad, siempre culpamos al que tiene hambre, al que roba un pedazo de pan, al que apenas puede sobrevivir, al que viste con harapos, al que voto por morena/por una promesa socialista/o una derecha que pregona empleos que nunca llegan.

Loach nos hace una pregunta, ¿por qué no miramos a los de arriba? a esos que reciben miles de millones de apoyo, los que no pagan impuestos, los que quebrantan la ley, los que lucran con trabajo infantil, destruyen la economía, manipulan el mercado, tienen esclavos legales en algunas partes del mundo, especulan con la miseria de millones de personas, y tienen miles de millones guardados solo para presumir, Tommy hace su parte a pesar de todo, de todo el sufrimiento y desgaste,  y Loach hace la suya aun con más de ochenta años siguiendo con su cine militante a favor del necesitado y desfavorecido, con todo y doble hermoso final ¿y nosotros cuando?

Calificación: Excelente

17 diciembre 2025

Cinecritica: Juego Limpio

"JUEGO LIMPIO" ("FAIR PLAY", ESTADOS UNIDOS, 2023) DE CHLOE DOMONT
Todo comienza en una fiesta donde admiramos la fascinante silueta de una mujer que es regresada a la fiesta por un hombre, todos la halagan y le dicen al también atractivo Luke (Alden Ehrenreich) que como es posible que ande con ella, que la amarre antes de que se de cuenta de que no la merece y que puede estar con alguien mejor, en tanto la segura Emily (una sorprendente Phoebe Dynevor, una gran sorpresa para un servidor) solo atisba a sonreír, los dos entran al baño y tienen relaciones de forma juguetona, simpática, casi humorística, de tal forma que el tipo queda embarrado de sangre menstrual al practicarle sexo oral, ante esto y completamente manchados solo sonríen, se miran coquetamente y de cuando Emily nota algo, Luke se arrodilla para pedirle matrimonio, la muchacha acepta, radiante de felicidad y al mismo tiempo incrédula, después de esto los dos escapan por la ventana dejando los zapatos de ella olvidados, y siendo Luke un macho alfa siempre a disposición de su futura esposa.

Con este inicio, una podríamos decir desagradable pero aclaratoria escena sexual, queda claro que son una pareja perfecta - o casi, porque probablemente no existe esa característica -, ambos son atractivos, exitosos, y seguros de si mismos, trabajan como analistas en una despiadada firma financiera que despide sin más a quien sea liderada por el amoral jefe Campbell (Eddie Marsan encarnando con solvencia un personaje maquiavélico), pero aun en ese entorno de despidos al no cumplir metas que culminan con berrinches destructivos y lloriqueos lamentables tienen la suficiente confianza para llevarlo bien, con el detalle de que la empresa prohíbe las relaciones entre trabajadores y al levantarse de madrugada y arreglarse para ir al trabajo se despiden para ir cada uno por su lado y no despertar sospechas, pero parece ser el único problema en una relación idónea, o es así hasta que corren a uno de los gerentes y Emily escucha el rumor de que el elegido para reemplazarlo es Luke, la chica va con gusto a mitotearle a su prometido eso, y lo celebran con mucho entusiasmo.

Pero la elegida al final es Emily, quien es llamada extrañamente a mitad de la madrugada para que su jefe le de la noticia en un bar, Emily regresa y le cuenta a Luke, quien la felicita, la abraza, la besa y le desea lo mejor estando radiante de felicidad, o así parece hasta ese abrazo donde solo nosotros vemos su rostro y ojos notando cierta incertidumbre ¿es acaso preocupación? ¿Qué es lo que lo dejo así? ¿será que siente que perderá a Emily? eso fue lo que me paso por la mente en ese momento, pero conforme avance la cinta nos daremos cuenta que las razones son mucho más denteras, resulta que Luke no es la pareja perfecta que aparentaba, su frágil ego masculino se ve afectado por el éxito de su mujer, y le ira ganando cada vez más terreno en su relación con ella, sintiéndose primero inseguro, luego menos, después desconfiado y finalmente resentido.

Y es que ella cada vez pasa menos tiempo con él, no hace caso de sus consejos, gana mas, socializa con los jefes y ¡Dios nos libre! ¡es su jefa directa!, esto causa que cada ve sea más arisco, lejano, amargado y grosero con ella, al grado de insinuar situaciones delicadas y ser pasivo agresivo en todo momento, en tanto Emily descubre que Luke no es tan brillante como ella pensaba, que tiene limitaciones y la verdadera razón de porque trabaja ahí, es entonces que comienza una guerra retorcida entre ellos donde los dos se dan donde más se duelen, justamente porque se conocen mejor que nadie y saben que hacer para lastimar al otro, así que estos antaño simpáticos amantes muestran su verdadera personalidad, entre ellos y para con nosotros, dos seres de naturaleza despreciable que se afectan de manera insidiosa, y que son capaces de todo con tal de lograr el éxito capitalista tan anhelado en el mundo actual.

Ya sea Luke rogando de forma  denigrante o Emily negando a conveniencia mientras pasa por alto una grosería vulgar inadmisible, y aunque la cinta muestra a Luke como alguien más malintencionado, incapaz de lidiar con su soberbia y ego, tampoco deja bien parada a Emily, que intenta apoyarlo de forma condescendiente y lo ve de forma lastimosa, tanto así que hacia el final de la cinta todo se sale de madre, en múltiples giros perversos que solo descubren más la naturaleza deleznable de ambos, y de la sociedad en general, hasta llegar a la escena espejo del momento sexual inicial, donde lo juguetón y el amor es cambiado por violencia y odio en una escena tan desapacible como incomoda, y un final soberbio que aboga por la violencia humana, y abraza la misantropía, de tal forma que uno solo puede reconocer una cosa buena en estos dos viles seres humanos, la dignidad de uno de ellos en un dialogo brutal que da el cierre perfecto a este malévolo e insidioso guion de la misma directora.

Calificación: Excelente

16 diciembre 2025

Critica: Todas las Habitaciones Vacias

"TODAS LAS HABITACIONES VACIAS" ("ALL THE EMPTY ROOMS", ESTADOS UNIDOS, 2025) DE JOSHUA SEFTEL
Visitamos la casa de los Blackwell, una pareja que muestra con dolor pero algo de emoción la habitación de su hijo Dominic, un risueño pequeño aficionado a los Dodgers y a Bob Esponja que desgraciadamente falleció en un tiroteo escolar, los padres sufren, pero se dan el lujo de bromear incluso en un detalle que demuestra un amor inconmensurable, cuando su madre enseña riendo y llorando que no han lavado el cesto de la ropa sucia, ya que huele a él, pero si la ropa interior y calcetines porque estaban asquerosos, es un momento que rompe la solemnidad, pero justo por ello causa más dolor, para presentarnos un dato devastador, desde 1997 los tiroteos escolares han crecido de 17 a 132 por año, una locura, una horrorosa locura.

Steve Hartman es un periodista que se dedicaba a la buena vibra, a esos reportajes buena onda que despiden los noticieros, notas curiosas y optimistas que intentan quitar el mal sabor de boca de las noticias de guerras, crímenes, inmoralidad y desigualdades, incluso los hacía sobre el lado "amable" de los tiroteos, el chico que actuó de forma valiente por ejemplo, pero cierto día, descubrió que ya a nadie le importaban, los normalizaron, y supo que algo de culpa venía de él mismo, ya que blanqueaba estas desgracias, desde ese momento decidió hacer un reportaje opuesto, siete años de visitar padres con hijos que fueron víctimas de estos sucesos, y escucharlos mientras su buen amigo y fotógrafo profesional Lou Bopp toma fotos de los cuartos del título, vacíos de la presencia de sus dueños, pero llenos de sus recuerdos, sus artículos, su tiradero, sus  olores, imágenes y preferencias.

Los seguimos durante las últimas tres visitas, donde una pequeña carismática e inaguantable, Hallie, fue víctima hace dos años, con sus padres recordándola con afecto y orgullo, y sus hermanos quejándose de lo enfadosa que era, para romper a llorar o batallar al decir lo que sienten por ella y la clase de persona que es, de ahí vamos a Texas, donde el cuarto de Jackie también se mantiene pulcro, justo como lo dejo, a excepción de una silla junto a su cama qué su padre usa a diario para hablar con ella, lo entendemos perfectamente, y duele aun mas con ese video que lo hace quebrarse donde la pequeña piensa que puede casarse con su papá, 
Gracie es la última parada, una chica desinhibida, que amaba cantar, presentarse frente a sus padres, grabarse, escribirse cartas a si misma, y se debatía entre dos outfits para el baile al momento de su deceso.

Escuchamos a los padres, Hartman si acaso les pregunta algo para que sigan abriendo su corazón, y Bopp se quita los zapatos en cada ocasión, porque lo entiende perfectamente, esos cuartos son sagrados para sus padres y no deben ser ensuciados por alguien como él, así que, escuchamos y vemos las vidas arrancadas de repente, sus gustos y anhelos, sus sueños y futuros, y los que tenían sus padres para con ellos, al final Hartman y Bopp entendió que los problemas no se evaden, y que debe aprovechar para pasar cada momento que pueda con sus hijos, sea en una llamada en medio del viaje, dejándose pintar las uñas por una pequeña adorable, o tomando una foto religiosamente cada día sin falta, porque a como están las cosas no se sabe cuando será el último día para disfrutar del amor y compañía de un ser querido, y no parece que vaya a cambiar esta terrible realidad con leyes rebasadas y moral perdida.

Calificación: Bastante Bien

15 diciembre 2025

Cinecritica: El Callejón de las Almas Perdidas

"EL CALLEJON DE LAS ALMAS PERDIDAS" ("NIGHTMARE ALLEY", ESTADOS UNIDOS - MEXICO - CANADA, 2021) DE GUILLERMO DEL TORO
En la conclusión de esta cinta noir Stanton Carlisle (Bradley Cooper, bien) esta conversando con el dueño de algún circo (Tim Blake Nelson en cameo) cuando de repente este suelta la frase de "trabajo temporal" y a uno se le hela la sangre, porque sabemos lo que viene más adelante, de hecho ya lo sabíamos porque las pistas se nos
fueron dando durante toda la película, de tal manera que el fantasma de esto siempre estuvo rondando por ahí, como un adelante del inevitable destino final de ese pobre diablo ambicioso, tanto así que desde una explicación clave de otro dueño de circo llamado Clem (Willem Dafoe, bastante bien) intuimos el inminente desenlace, pero aún así este golpea como un marro porque es aquí, cuando el protagonista por fin entiende su parte/lugar en la historia de la vida, y donde por supuesto la cinta deja de ser de del Toro para abrazar la depresiva y pesimista misantropía del libro de William Lindsay Gresham.

La historia comienza con Stanton arrastrando lo que parece ser un cuerpo envuelto para luego quemar una casa - ¿su casa? - sin mirar atrás, se topa con un circo donde conoce a un grupo de freaks con los que hace equipo, y donde aprenderá a embaucar al respetable, o quizá lo contrario, ya que las personas que visitan estas extrañas atracciones y shows en realidad solo aspiran a ver a alguien más miserable que ellos para sentirse mejor con sus horribles vidas, por lo que los asiduos clientes de estos lugares no solo quieren ser engañados, sino que principalmente quieren sentirse mejores que esos monstruos de circos que apenas tienen donde comer y dormir, y que mejor que este sea un monstruo/geek que coma cartílago arrancándolo a mordidas del cuello de una gallina, algo que extrañamente si despierta algo en el miserable Stanton, al que conforme conocemos entendemos que es solo un ambicioso sin escrúpulos cuyo mayor pecado será querer engañar a tramposos más inhumanos que él.

La primera parte de la cinta transcurre en el circo ambulante, en los terrenos conocidos del director, con muchos cameos de actores famosos (aparecen por ahí Mark Povinelli, Clifton Collins Jr. y su actor fetiche Ron Perlman), y es donde encuentra (mejor dicho elige) su profesión, de la mano de la suelta Zeena (Toni Collete) y su esposo Pete (David Strathairn), quien termina siendo su mentor, además ahí conoce a la angelical Molly (Rooney Mara) con quien desea compartir su vida, que además sirve para mostrar que la actuación abarca toda su vida al ser el dedicado enamorado de la chica, cuando Carlisle se siente preparado no duda en volar solo, para dar paso al segundo acto en la ciudad, donde Stanton es un famoso mentalista con ¡dos funciones diarias! aunque para esto se la pase regañando a su mujer, hasta que conoce a la doctora Lilith (Cate Blanchett, perfecta) quien es su boleto de entrada al mundo espiritista donde puede quitarle billetes a ricos y poderosos.

Esto da paso a la tercer y última parte de la cinta donde la metáfora se completa, una que se ve venir desde mucho antes pero aún así golpea con muchísima fuerza, esto gracias al ritmo que imprime el director que va siempre in crescendo, junto a un diseño de producción precioso, una fotografía impecable y una iluminación bellísima qué bebe del cine negro al que homenajea, así la cinta empieza con un tono pausado, casi como un sueño, pero va aumentando el ritmo en la ciudad donde además el tipo de arte cambia, para dar parte a esa acelerada parte final donde la violencia, la sangre y los monstruos verdaderos afloran, así que lo más interesante es la historia que viene del libro, donde se nos deja claro que Stanton no solo es un hombre ambicioso sino que es un monstruo capaz de pasar por encima de todo y de todos con tal de lograr sus metas, pero comete un grandísimo error que le advirtieron múltiples veces pero que el tipo siempre se paso por el arco.

Carlisle empieza a creer sus mentiras, a irrespetar todo, aunque le han dicho que nadie puede escapar de Dios, su soberbia lo lleva a creer que es más astuto, más amoral, más inmoral, más perverso y más monstruoso que los que lo rodean, sin darse cuenta - aunque nosotros si - que se ha topado con monstruos de verdad, unos con una maldad tan grande que ni siquiera puede concebirla, y para cuando lo descubra será demasiado tarde, porque esos monstruos están a plena luz del día, son respetados, admirados e idolatrados, sea en el multimillonario Ezra Grindle encarnado magníficamente por Richard Jenkins, sea la
pérfida Lilith destilando clase como la femme fatale clásica del género,  estos son los verdaderos monstruos, ocultos no solo por belleza y labia como Stanton, sino por la idolatría social, por su lugar en el mundo, por sus conexiones, y justo por ello no les importa el dinero - ¡ya tienen mucho! -, sino el poder, la destrucción y el ego, hacen el mal porque pueden y porque quieren, porque les divierte y lo gozan, y porque siempre ganan, enviando a pobres diablos como Stanton, que cual Ícaro creyó que jugaba en las mismas ligas, pero al perder ante estos monstruos quedar condenado a un destino del que no sabe si reír o llorar como se muestra en esa portentosa y desquiciada imagen final.

Calificación: Excelente

Critica: La Muerte de Dos Amantes

"LA MUERTE DE DOS AMANTES" ("THE KILLING OF TWO LOVERS", ESTADOS UNIDOS, 2020) DE ROBERT MACHOIAN Un hombre aparece en p...