Va, la más reciente entrega de Creed es también el debut de Jordan que no lo hace mal pero que si adolece varias cosas que distraen irremediablemente de una cinta que tiene las mismas virtudes y defectos que la saga Rocky, esta vez Adonis (Michael B. Jordan but of course) ya esta retirado y se dedica a ser mandilón de su esposa Bianca (Tessa Thompson), niñero de tiempo completo de su hijita sorda (Mila Davis-Kent) y preparar a su siguiente pupilo latino de apellido Chávez (Jose Benavidez), pero cuando sea visitado por su antiguo mejor amigo, el frustrado Damian Anderson (Jonathan Majors robándose cada escena donde aparece), el campeón retirado deberá lidiar de nuevo con un pasado doloroso que creía olvidado y enfrentarse a la culpa de abandonar un amigo, y es así como la cinta se basa/homenajea/roba la premisa de la primer e inigualable "Rocky" intentando darle una vuelta de tuerca que la haga parecer innovadora, es decir, de nueva cuenta tenemos a un don nadie desconocido y perdedor tener una oportunidad frente al campeón, pero aquí los papeles están cambiados y el malo maloso es el retador.
La verdad aplaudo que esta vez la razón de la pelea sea algo más interesante y creíble que las dos anteriores, que se sentían como una especie de refritos de tramas de la saga del legendario Balboa, y debo añadir que las escenas donde Majors, es decir Damian visita a Creed son las mejores de la cinta, desde que se ven por primera vez y lo tijerea de pies a cabeza y a su automóvil, luego la visita a su casa donde cada mirada es de envidia y resentimiento, incluso algo de amargura y rencor a él mismo, con todo y mirada casi lasciva a su mujer, y comentarios ácidos, por lo bien logrado de estos momentos y la exquisita interpretación de Majors uno no termina de entender que veamos tanto el mismo flashback y se sobre-explique tanto el pasado, esos momentos y el sentir de Damian, es algo obvio y ya lo entendimos, quizá por ello cuando ya conocemos al bien construido villano y nos centramos otra vez en la vida de Creed la cinta se detiene, como empantanada.
Y aquí es donde viene el peor pecado de la pelicula, de nueva cuenta como en la segunda Creed intentan hacer un drama novelesco que estorba en lugar de aportar, la subtrama de la mujer no aporta nada, las larguísimas escenas con la hija parecen solo existir como promesa de una futura cinta Creed con protagonista femenina al pasar la batuta, y muchas otras cuestiones no se explican pero si se ponen sobre la mesa, por lo menos cuando llega la parte de la pelea uno comienza a respirar otra vez, pasando el susto, y es que aunque el entrenamiento es quizá de lo peorcito en la franquicia, y la pelea final peque de innovadora y fresca por lo menos llega la obvia y esperada resolución final que sigue siendo culposamente agradable, lastima que el soundtrack no ayude, y que se termine extrañando mucho a Rocky, sorry Adonis, a pesar de todo el semental italiano sigue siendo la estrella y falta su cansina voz junto a su exuberante figura.
Calificación: Palomera