15/3/23

Cinecritica: Un Príncipe en Nueva York

"UN PRINCIPE EN NUEVA YORK" ("COMING TO AMERICA", EU, 1988) DE JOHN LANDIS
Una colaboración entre dos de los reyes de la comedia de los ochenta, por un lado Landis que tuvo sus años de brillo en esos momentos, con un desenfado e hilaridad en la comedia que poco tiempo después perdería, y por el otro lado Eddie Murphy, cuya simpatía, naturalidad y carisma tenían ganadas a las masas, ya habían trabajado antes en "Trading Places" llamada aquí "De Mendigo a Millonario", y justamente nos regalan lo que les estaba saliendo bien en esos momentos, una comedia que intentaba (aunque no lo lograba por completo) reírse de todos y de todas dirían ahora, pero cuyo tema central era un discurso mucho más conservador del que uno podría suponer, aquí tenemos al príncipe Akeem (el mencionado Murphy)  del país ficticio de Zamunda, un tipo que no ocupa hacer nada por el mismo, ni siquiera asearse sus parte privadas, y que ya tiene elegida una esposa (Vanessa Bell Calloway) que esta dispuesta a seguir todas sus ordenes como se muestra en un chiste tan ridículo como incomodo, y esto si en la época que sea.

Pero el príncipe Akeem no quiere alguien así a su lado ya que quiere casarse por amor, y para esto no se le ocurre nada mejor que viajar a Estados Unidos, específicamente a Queens por aquello de buscar una reina, y por supuesto instalarse en el lugar mas "humilde" de todos mientras se hace pasar por un pobretón, por aquello de que lo amen por quien es y no por lo que tiene, después de una hilarante búsqueda con entrevistas ridículas se enamora de Lisa (Shari Headley), una linda e inteligente joven, y entra a trabajar al restaurante de su padre que es una copia descarada del McDonalds, pero para conquistar a la joven debe enfrentarse al pedante novio millonario (Eriq La Salle) de esta, y a su ambicioso padre (John Amos) que intentaran frustrar los intentos del pobre tipo, para acabarla de amolar su sirviente Semmi (Arsenio Hall) no esta contento con vivir como pobretón y gasta dinero, le pone dedo y hasta se hace pasar por él para poder disfrutar la vida.

La cinta comienza con un humor machista rayando lo misógino que no causa tanta gracia como debería, en parte porque cuando uno se va acostumbrando el humor cambia de tono a uno más simplón que ya no abandona, incluso en este inicio vemos opulencia y bailes, algo que también se deja de lado para enfocarse en una historia de amor donde la película de plano va dejando de lado el humor para concentrarse únicamente en el romance, aunque estos cambios de tono hacen que la cinta se sienta quebrada nunca molestan, y la película se disfruta de principio a fin ya que siempre se mantiene amena, a personajes que caen bien y multitud de secundarios que aportan algo, ya sea James Earl Jones como el rey dándole un toque de seriedad al asunto o los muchos personajes que hacen Murphy o Hall (el judío estereotipado, el predicador locochon, los barberos parlanchines), y hasta unos jóvenes Cuba Gooding Jr. y Samuel L. Jackson con este ultimo como saco de boxeo, una película con bonito romance con algunas curiosidades.

Calificación: Palomera

No hay comentarios: