MÁS QUE A NADA EN EL MUNDO (ÍDEM, MÉXICO, 2006) Alicia (Julia Urbini, muy bien) se muda junto a su mama Emilia (una sorprendente Elizabeth Cervantes) a un departamento, se entiende que esta escapando de una relación toxica de dos años con un hombre casado, desde el inicio la pequeña de siete años se sincera diciendo que su mama a veces tiene malos ratos, pero también buenos, y que por supuesto la ama muchísimo, es decir la ama más que a nada en el mundo, esta siempre pendiente de ella, de su estado de animo, de sus acciones, de sus gestos, se entristece junto con ella, y atesora los objetos que las vinculan como una foto clave en la historia, el problema es que Emilia es una "madre soltera" o por lo menos lo unico que sabemos con una conversación es que al padre de la niña no le interesa y vemos que nunca se aparece, por lo que Emilia debe criarla sola llevándola a la escuela, trabajando, ayudando con las tareas, sacándola a pasear, y aunque la madre parezca disfrutar esto muy pronto notaremos que no es así.
Emilia es una mujer dependiente y auto-destructiva que no para de fumar y medicarse, y que siempre necesita un hombre a su lado aunque todos notemos, por supuesto incluyendo a la pequeña, que no son mas que patanes que la buscan para diversión, por lo que en cuanto llegan al departamento y soltera la joven mama comienza a salir con un pesado amigo del trabajo (Andrés Montiel) que la busca en su casa todos los días y que le roba a su mama cada que puede, y lo que es peor, usan la casa para hacer las cochinadas que la niña se ve obligada a escuchar, todo esto mientras la pequeña pasa por una etapa fantasiosa donde cree que los vampiros existen, y que el vecino demacrado y desahuciado (Juan Carlos Colombo) es uno, y ¡peor aun! que tiene controlada a su mama, razón por la cual actúa tan extraño, ya no la pela, y de plano se porta mal, ofensiva y hasta violenta con ella.
Con la pequeña cada vez mas desesperada e introvertida la madre se vuelve mas y mas desesperada con ella, en tanto su relación truena porque era obvio que la usaban y regresa a la anterior que como de costumbre, no respeta a ninguna, así en medio de tanto hombre ajeno, con su mama en depresión tirada en la cama todo el día, evitándola y evitando la luz del sol Alicia teme lo peor por lo que hará lo que sea con tal de salvar a su querida mama. Esta claro que la historia escrita por los mismos directores Andrés León Becker y Javier Solar nos muestra una familia quebrada, una mujer que ama a su hija pero que no esta preparada para tenerla, la ama pero le estorba para hacer una "vida plena" a como entiende ella, una niña que no sabe que le pasa a su mama pero que subconsciente comprende todo por lo que decide crearse una fantasía que le ayude a confrontar la realidad, no es casualidad que el patán de Mario y el vecino vampiro lleguen al mismo tiempo a su vida, y así esta dolorosa historia sobre vampiros ficticios y malos padres nos tiene con el alma en un hilo, una cinta tan minimalista como emotiva que nunca chantajea y que nos muestra una terrible realidad, la de las de personas que son padres sin querer serlo en realidad, y cuyo unico problema es ese final forzado, por lo demas una cinta valiosa.
Calificación: Muy Bien