Al inicio de la cinta vemos al duro Joe (Joaquin Phoenix, excelente) cobrar su dinero despues de hacer su trabajo, el tipo es rudo, profesional y de pocas palabras, nunca nos cuenta nada de el pero por medio de su jefe sabemos que es un ex marine, ex FBI que ahora trabaja por su cuenta, o por lo menos como externo ya que el investigador privado John (John Doman) es el que le pasa los trabajos que no son otros que el rescate y las revanchas supongo de las tratas de blancas, el tipo es metódico y cuidadoso pero en cierto momento un chico descubre donde vive y apenas despues es contratado por el senador Albert Votto (Alex Manette) para que encuentre a su hija Nina (Ekaterina Samsonov) que parece se ha ido por mal camino, Joe decide tomar el trabajo, algo de rutina, se prepara al mismo tiempo que hace su vida normal que no es otra que cuidar y convivir con su madre (Judith Roberts).
No tiene amigos ni otros familiares, no tiene relaciones sentimentales entendemos desde hace una década y a Joe no parece interesarle menos, el tipo vive su presente de manera melancólica y siempre pensando en el pasado que vemos pasar en pantalla como destellos donde conocemos algo de su vida, su traumatizante infancia con padre agresivo, sus dolorosas vivencias como investigador, y su fijación a la asfixia, hay muchas otras que nos dicen mucho de Joe y el porque es asi ahora, o mas bien dicho porque actúa asi ahora, porque su personalidad es lo que dicta quien es, un huraño tipo pasado de peso lleno de cicatrices que no duda cuando debe tomar la justicia violenta en sus manos. La directora Lynne Ramsay logra una cinta dolorosa, fuerte, que nos deja pensando y fascinados, con guion propio adaptado del libro del mismo nombre de Jonathan Ames, pero que principalmente fascina por una estupenda dirección que nos hipnotiza con una fotografía excelsa y tomas siempre cambiantes, tomas fijas, largos planos en movimiento, acercamientos, y hasta el blanco y negro de una cámara de seguridad.
Incluso aprovecha esto en la forma de mostrar la violencia, de pronto es directa, sin consentimiento al espectador, y de pronto esta fuera de plano o de foco, donde simplemente se sugiere, una contradicción que le da mas fuerza a la misma violencia y a la historia en si, no dejándonos regodearnos pero tampoco apartar la mirada, y la banda sonora del guitarrista de radiohead Jonny Greenwood es esplendida, de los mejor que he escuchado, parece que el mismo estuvo en la edición y hasta en tomas porque siempre esta de acuerdo a lo que sucede en pantalla y lo mejora. Una muestra de cine moderno que se actualiza sin dejar de lado sus bases, cine sucio y siempre critico de la sociedad y en especial de los poderosos, porque cuando Joe descubre donde esta la chica y se dispone a rescatarla con martillo en mano (apología a los gringos cuidando el país supongo) la aventura del pobre diablo apenas empieza, la relación con Nina se hará fuerte y le dará una razón para luchar como se ve en esa hermosisima escena en el lago, pero lucha contra algo invencible, y hasta nosotros nos sentimos vulnerables y desesperados cuando un extraño suicido aparezca en las noticias y el protagonista se de cuenta de que esta metido en algo que involucra a las mas altas esferas, pero no por ello piensa detenerse, aunque tenga que matas policías, acompañar a agentes en sus últimos minutos o vengarse al perder todo.
Calificación: Muy Bien