Cinecritica: Atenea

"ATENEA" ("ATHENA", FRANCIA, 2022) DE ROMAIN GAVRAS

Comienza la cinta con un desbastado militar llamado Abdel (Dali Bensalah) que llega a una rueda de prensa para hacer un llamado a la justicia ya que su pequeño hermano de 13 años fue asesinado a golpes, supuestamente por tres policías, pero también dice que deben mantener la calma, entonces la cámara se mueve a otro rostro, el de su hermano radical Karim (Sami Slimane) que no esta dispuesto a esperar, y arroja una bomba molotov ya que este a diferencia de su hermano desea venganza, o por lo menos que arda todo, de aquí vemos como toman la comisaria a golpes, bengalas y bombas molotov, se roban la caja fuerte, una camioneta policial y huyen mientras los derrotados policías intentan detenerlos, la cámara sale de la camioneta para ver el escape de todos y como unos motociclistas hacen piruetas celebrando, la cámara regresa al interior del auto, llegan al barrio marginal ficticio que da titulo a la cinta, seguimos a Karim dando ordenes, regañando a sus hombres para que tomen todo en serio y finalmente llegar a lo alto de la entrada del lugar cual si fuera general liderando a sus hombres en una guerra inevitable.

Viendo esto, es decir un virtuoso, apabullante y enfermizo plano secuencia de 11 minutos donde la cámara hace piruetas por todos lados y uno solo se pregunta como lograron eso, y con ese soundtrack fusión de lo orquestal con lo electrónico con coros griegos la cinta me tenia ganado, estaba genuinamente emocionado y aunque el final de la película no es de la misma calidad si se sostiene como una recomendable cinta dramática, y esto me hace llegar al segundo punto, desde que vi el primer plano secuencia con los toques de los hermanos, la tragedia, la rabia incontenible, la emulación a una guerra de antaño y los coros me quedo claro que estaba ante una representación de una tragedia griega en nuestros días, y quizá por ello la disfrute bastante, dejando de lado lo que muchos critican, que si no esta bien planteado la critica social y etc. es cierto que estas quejas tienen validez, pero no porque el mensaje social debe ser más claro o explicarse con exposiciones, sino porque hacia el final de la cinta el personaje central toma decisiones tan viscerales y tantos cambios que ni en las tragedias griegas se veían.

Pero por lo demás la cinta es impresionante, desde ese prodigioso plano secuencia, la buena presentación de los otros personajes centrales, la logística del asunto, la música y por supuesto ese sentimiento de tensión que existe porque sabemos que es imposible que la situación termine bien, los cuatro personajes centrales están bien logrados, no necesitan exponer sus pensamientos por medio de diálogos monólogos, sus acciones y gestos son suficientes para saber que les pasa por la mente, desde el recto Abdel que sigue las reglas y confía en las autoridades (su abuelo argelino peleo por Francia una guerra), el anárquico Karim que esta resentido con el sistema, el medio hermano Mokhtar (Ouassini Embarek) que cumple los estereotipos que le da otorga la sociedad ya que es un narcotraficante que en plena guerra solo se preocupa por como esto afecta su negocio, todos hermanos, con diferentes motivaciones y pensamientos, pero con caminos que convergen, de nueva cuenta cual tragedia griega, y finalmente el policía buenazo Jerome (Anthony Bajon) que anda con las uñas pintadas por jugar con su hija, y que no quiere hacerle daño a nadie, pero por mala fortuna termina en medio del barrio completamente solo.

Y todo esto lo vemos en algunos planos secuencias muy bien montados, con un trabajo de edición majestuoso, y un soundtrack poderoso que evoca lo épico, lastima que al final el protagonista se desvirtué tanto que uno no termine de entenderlo, y que justo en su tramo final el director y guionista cometa el error de querer dar respuesta a la violencia, cerrando todo en ideas demasiado facilonas, frente a un conflicto que no puede abordarse con un enfoque tan simplista, ya que al final un extremista islámico hace lo que sabe y con ello pone fin a todo, y el epilogo nos muestra a los culpables, haciendo que todo sea demasiado sencillo, creo que había mostrado que el tema tiene más vertientes, pero no se animo a dejar todo ambiguo, pero bueno, se le perdona porque para esto ya regalo el plano secuencia inicial el del éxodo donde la cámara vuela al final para un cenital y el asalto al estilo romano con todo y formación tortuga mientras vuelan bengalas y los coros griegos ponen la piel chinita, cine espectáculo pero bien hecho.

Calificación: Bastante Bien