EL MISTERIO DEL FARO (THE VANISHING, GB, 2018)
En 1900 tres fareros desaparecieron "literalmente" de una de las islas Flannan, habían sido dejados ahi para trabajar seis meses cuidando el faro y cuando el barco de los suministros hizo una visita despues de días de tormenta no se hallo a nadie, pero tampoco se encontró rastro de ellos, ni peleas, ni objetos, la bitácora en una ultima anotación normal solo media ahora antes de que el reloj se detuviera en la hora de las 9:30, lo que dio paso a mitos y leyendas sobre el relato que persisten hasta nuestros días, lo cierto es que el director danes Kristoffer Nyholm nos otorga una posibilidad que podría haber ocurrido, anoto esto para que nadie piense que al ver la cinta tendrá el misterio resuelto sino todo lo contrario, lo que si es interesantes es que la cinta escrita por Celyn Jones y Joe Bone hace caso omiso de asuntos sobrenaturales o monstruos marinos, vamos que hasta la tormenta y posible ola gigante que los arrastro es dejada de lado, una versión que no explica ni el reloj ni la puerta cerrada con llave, para dar paso a una suposición realista de la naturaleza humana.
Así la historia se va por otros derroteros, hacia un thriller dramático donde somos testigos de como tres almas atormentadas viajan al infierno después de que un bote llega a la isla con un tipo que pelea hasta morir y un extraño baúl que primero es enigmático y despues el objeto del deseo, donde la codicia, la avaricia y las mentiras van rodeando a los protagonistas, ya sea entre ellos mismos, con la llegada de unos arios de pocas pulgas y finalmente con la locura desatada por la violencia y un poco de mercurio en el cerebro, y como apunte antes los tres hombres aunque duros y viriles son tipos que lidian con sus propios fantasmas, desde el experimentado Thomas (impresionante Peter Mullan) que sufre por la muerte de sus hijas y la culpa de la de su mujer, el buenazo James (Gerard Butler sorprendiéndome gratamente) que lidia con problemas de dinero para mantener mujer e hijos, y el "bastardo" Donald (Connor Swindells) que no puede con su estatus de paria social que no le permite ni pasear con una señorita de buen ver.
La violencia, el drama, la culpa, los fantasmas del pasado, la codicia, la venganza, en pocas palabras la naturaleza humana es lo principal en esta cinta que nos regala unas interpretaciones brutales y un ambiente aislado y claustrofobico con la fotografía de Jorgen Johansson que al mismo es hermosa, una cinta que nos recuerda que lo peor y mas peligroso no son las tormentas ni los monstruos marinos sino los deseos y pecados humanos que se pueden convertir en aquello que odiamos y enfrentamos en apenas un momento.
Calificación: Interesante
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