Dejamos por un momento los clásicos y nos ponemos al cine de terror casi de serie B actual que nos invade casi semana por semana en uno de los géneros mas redituables que ha encontrado Hollywood, la segunda parte del demonio alado coleccionista no tiene mucho que ver con la anterior a no ser el demonio protagonista, si no bien pudiera pasar como película diferente, pero de que cumple lo hace y lo hace bien, Víctor Salva creo un villano con carisma y que encontró su nicho en el terror, después de todo un demonio inmortal, invencible, con cara de Krueger combinada con criatura marina no es algo para tomarse a la ligera, y de nuevo nos lo demuestra.
La cinta comienza muy bien con una familia de granjeros que haciendo sus tareas pierden al mas pequeño cuando la criatura se lo lleva después de una desesperante escena donde se hace pasar por espantapájaros, y cuando vemos la cara del padre sabemos que no se detendrá hasta recuperarle, el problema es que eso es lo mejor de la cinta y de aquí solo puede bajar, el camión de estudiantes campeones de baloncesto, las rivalidades raciales, los chismes de homosexuales, las novias porristas acompañantes, y los rudos adultos se convierten en el menú de la bestia que se encarga del camión y los empieza a cazar, aunque ya sabemos, prefiere algunos por el olor que despiden algunos órganos que el desea.
Y aunque la calidad baja la verdad es muy divertido ver adolescentes pedantes masacrados y asustados por el demonio así como también el que estos le puedan causar daño, principalmente las chicas que le atraviesan la cabeza al grado de perderla, no como los chicos que simplemente son idiotas, y al final el granjero llega para cobrar venganza en un final que sabe agridulce y abierto, no solo en su aburrido y ñoño clímax sino en que parece que no supo como terminar.
Calificación: Palomera
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