Comencé a ver la cinta con desconfianza pero por fortuna el director Jean-Marc Vallee hace muy bien las cosas y en lugar de darle un cuidado chantajista y sentimentaloide como se acostumbra se decide por una biopic limpia, sin aspavientos, mostrándonos a este carismático héroe sucio Ron Woodroof (Matthew McConaughey, excelente) que en ningún momento quiere o espera que sientas pena o lastima por el, lo que el quiere es que se le reconozca y hace hasta lo imposible para sobrevivir, sin lamentaciones, sin reclamos, sin ir con sus amigos y familiares para reconciliarse con ellos y gran ayuda de eso es por la formidable actuación de McConaughey que en todas y cada una de las escenas hace un trabajo impresionante, lo mismo que Jared Leto que esta mas que impecable como el homosexual Rayon que ayuda a Ron en su lucha, y es asi, en su lucha pero no contra la enfermedad o aceptar la muerte sino contra lo mas corrupto, sucio y maltrecho que existe, el gobierno.
Nos es presentado Ron como ese borrachales drogadicto que ama las apuestas para inmediatamente soltarnos que tiene sida, en cierto desmayo en el trabajo lo hospitalizaron y lo descubrieron, Ron al inicio se niega a creerlo, mas aun cuando le dicen que solo tiene treinta días de vida, quiere entrar a cierto tratamiento con AZT que tiene una farmacéutica pero se lo impiden, por lo que decide conseguirla por su cuenta, hasta aquí el tipo ha replanteado su vida, ha rezado, ha comprado la dizque cura, sigue con su tipo de vida y hasta se ha peleado con sus amigos que ahora lo tachan de marica y le tienen asco, algo que el mismo Ron sigue haciendo todavía con una homofobia latente, pero cuando casi muere lo descubre el hospital y decide viajar a México donde un medico sin licencia le confiesa que el AZT es solo veneno y le prescribe vitaminas y proteínas junto a una vida sana que lo ayudan bastante, tanto asi que meses después sigue vivo y mucho mas saludable.
Es aquí cuando la cinta ya ha comenzado su planteamiento, la FDA es un nido de víboras a la que no le importa la salud de los contribuyentes y solo le interesa ganar junto a la farmacéutica que les pague como abogados garroteros, Ron se mete en el negocio del trafico de "vitaminas" porque la FDA no quiere que alguien les quite el negocio, las mete como puede, identidades falsas, venta al menudeo, se alía con el carismático Rayon quien consigue muchos clientes y cuando lo ataca hacienda y el gobierno hace el club del titulo donde "solo" vende membresías, estos se multiplican por todo el país y el gobierno los hace ilegales mientras Ron trata con todas sus fuerzas seguir vendiendo estos productos que si ayudan en la lucha contra el sida, viaja por el mundo, ve resquicios legales, convencer a cierto medico (Jennifer Garner) consigue recetas medicas de otros países, trafica por las fronteras, inventa un esquema de venta, es ahí donde la cinta se diferencia, Ron no solo es un luchador contra su enfermedad, la acepta y vive con ella, es que se convierte en un hábil hombre de negocios que no solo busca hacer dinero sino que ayuda a los demás, quiere que vivan mas tiempo, que tengan mejor nivel de vida y pelea contra el gobierno por la corrupción que impera ahí, es ahí donde Ron se convierte en algo mas, cuando muestra las inmundicias de la FDA y las farmacéuticas, auténticos asesinos que solo buscan los billetes como le grita desesperado a cierto medico corrupto o cuando implora públicamente que lean su investigación, no es medico pero esta mucho mas informado que la mayoría, por eso duele tanto su fracaso al final, porque a pesar de como se quiere pintar Ron fracaso en el intento pero gano en la historia donde será recordado de manera muy diferente a como lo será la FDA.
Calificación: Bastante Bien