En la primer escena de la cuarta cinta de la dupla Beck-Woods vemos a dos hermanas mormonas hablar sobre una marca de condones, una esgrime que a pesar de la fama son iguales a los demás, y la otra comenta que no puede ser posible, ya que no solo la marca realza esa característica sino que todos están de acuerdo en que una verdad, desde aquí la cinta deja implícita su idea principal, el como una narrativa repetida y publicitada puede afectar la narrativa general de la sociedad para con ella, más allá de lo real o falsa que resulte ser, al final el consenso, la fama, la idea popular, se encuentra ahí, entonces vemos a las hermanas - la segura y directa hermana Barnes (Sophie Thatcher) y la ingenua y dulce hermana Paxton (Chloe East) - tratar de predicar la palabra de Dios, que en estos tiempos a nadie le interesa o de plano hacen risión de ella como esos crueles adolescentes y el chiste de la ropa interior mágica, algo a lo que no es ajeno la inocente Paxton que secándose las lágrimas recuerda ese hilarante musical de South Park donde los ridiculizan.
Con estas platicas y situaciones ya conocemos perfectamente a las chamacas que tienen una parada en una casa en la colina donde los recibe el encantado Mr. Reed (Hugh Grant, en estado de gracia) que las convence de pasar porque afuera hay una tormenta, demuestra interés en el tema religioso y su mujer está dentro horneando una tarta, las mujeres no pueden negarse, después de todo Grant sigue conservando y usando todos esos tics que le dieron fama al ser el carismático y adorable galán de los noventa, un leve tartamudeo, esa atención que demuestra al escuchar a los demás, los ademanes exagerados y nerviosos de su cuerpo, la tierna sonrisa que al mismo tiempo parece una mueca, y esa dicción nerviosa pero atrayente ya que puede cambiar el tono de pronto a decir las cosas con la mayor seguridad posible, todas estas características se usan en un tono muy diferente, ahora su sonrisa adorable como mueca va cambiando hasta convertirse en un gesto malvado, esos ojos atentos cambian a una mirada penetrante, y esa seguridad en los diálogos toman un giro malévolo.
De tal forma que cuando las chicas se sientan y la cierra se puerta nosotros como espectadores ya sabemos que esto no puede terminar bien, algo que ellas también notan de inmediato ya que el "amable" señor Reed si está muy interesado en la religión, pero no en lo que ellas tengan que decir, sino en lo que él les puede cuestionar, por lo que empieza un monologo donde suelta sus ideas sobre su religión, y el como Joseph Smith uso la secta que fundo y a la que pertenecen para poder tener muchas mujeres, algo que Barnes intenta explicar en un argumento que parece pretexto, pero Reed no se detiene ahí, siguecuestionando, preguntando, atacando de forma sutil, sugiriendo blasfemias, y finalmente haciendo analogías de las principales religiones monoteístas con el juego de mesa monopoly - que inicio con una idea muy diferente a como se usa actualmente - y demostrando su punto con Lana del Rey que como todas las cantantes actuales tienen cero de originalidad, y como plagio "Creep" de "Radiohead" que a su vez plagiaron "The Air That I Breathe" de "The Hollies" dejando un claro un punto clave.
Toda esta parte de la cinta es magnífica, con un Grant esplendido que usa todas sus características dándoles un giro siniestro, y que justo por esa normalidad, por la amabilidad, por la temática intelectual del ataque, crea un villano muy original y poderoso, demostrando de nueva cuenta que es un gran actor, algo que demuestra película tras película en esta nueva etapa, e incluso le da un tono cómico a todo, uno oscuro, usando humor negro, donde a pesar de la situación nos es imposible contener la carcajada con sus extravagantes muecas, imitaciones, sarcasmos, puntadas y hasta momentos cantados, la segunda parte sigue la historia y avanza más la trama perotambién es cierto que es más convencional, pero continua siendo interesante y sorpresiva, algo que se va perdiendo en su clímax final, donde queda claro el punto del villano, pero más aun su verdadero naturaleza, con todo y mensaje final alentador, lástima que no mantiene el nivel inicial pero en general es una buena cinta, con un villano formidable, y protagonistas inteligentes en premisa interesante, un buen thriller con una fotografía formidable e interpretaciones impactantes en ese juego de gato y ratón que nunca pasa de moda.
Calificación: Bien