En cierta escena clave de esta magnifica cinta escrita y dirigida por Cheng Wei-Hao basado en el libro "The Soul" de Jiang Bo el intachable e implacable fiscal Liang Wen-Chao (el legendario Chang Chen en estado de gracia y con el cuerpo en una fragilidad que golpea) le reclama a su abnegada mujer Ah-Bao (Janine Chun-Ning Chang, bien) porque realizo una acción que aunque le ayudaba personalmente carecía de integridad, la escena va todavía más allá pero este momento mencionado deja claro la precaria situación de los personajes y el genero principal de la cinta, que aunque comienza como una película de misterio con asesinato a resolver en realidad es un complejo noir que nos remite a lo mejor del cine negro, con todo y femme fatale con todo y vuelta de tuerca, y finalmente abraza con fuerza el genero de ciencia ficción para conjuntarlo al noir, tanto así que por momentos extrañe una atmósfera más parecida a la de esa obra maestra llamada "Blade Runner".
De todas maneras la historia esta establecida en el año 1932 y la tecnología más avanzada se mira en ciertas cuestiones durante toda la cinta para que aceptemos de mejor manera lo que se presenta, la película comienza con la policía atendiendo un llamado de emergencia y descubriendo el cadáver brutalmente asesinado del multimillonario Wang Shi-Cong (Samuel Ku) junto a la criada, la nueva y joven esposa Li Yan (Sun Anke, majestuosa) esta desmayada a su lado, con toda esta escena que parece salida de una película de terror pasamos a conocer al fiscal Liang que tiene un cáncer terminal con todo y esposa embarazada, bajo estas circunstancias decide trabajar lo más que puede para dejar más protegida a su familia, toma el caso más importante que es el que vimos al inicio, el tipo es un profesional y no se deja llevar por lo aparatoso del asunto con todo e hijo completamente tatuado escapando de la escena del crimen.
Liang Wen-Chao deduce que quizá el doctor preparo todo con la chica y lo presiona, al tiempo se sabe que Li Yan actuaba raro, casi como poseída como se puede ver en las incomodas grabaciones de su cuarto, no solo eso, la chica era derecha y ahora es zurda, de ahí pasamos a la teoría de la maldición de la mujer fallecida Tang Su-Zhen (Baijia Zhang) y como pudieron ayudarla dos personajes más poseyendo a la nueva esposa, lo que explicaría los cambios radicales que tuvo, a excepción de uno, la desvergüenza de posar desnuda y andar así cuando antes se cuidada de las cámaras en todo momento, para después pasar a una nueva teoría más de nuestro protagonista, y que le da una vuelta total a la cinta, por si esto fuera poco falta una vuelta de tuerca final que nos deja totalmente descolocados por su valentía, el atrevimiento y porque ahí se ensamblan todas las piezas del rompecabezas sin que nada se sienta fuera de lugar.
Y finalmente la forma de resolverse que no solo despierta todos nuestros sentimientos sino que remite a ese cine oscuro y sin esperanza, en el que la justicia solo puede existir si los buenos están dispuestos a entregar todo de si, la fotografía con movimientos pulcros, con clase y el uso de esos colores verdosos nos sumerge en el cine negro, con la historia en esos derroteros, con los empresarios poderosos como agentes del caos y la inmoralidad, una misantropia que duele y dilemas morales profundos bien tocados en esa ciencia ficción que aboga al corazón, con una banda sonora exquisita y el ritmo exacto donde se nos regalan escenas memorables en todo momento, se puede ser malvado sin importar la preferencia sexual, y se puede ser buen padre aunque no podamos disfrutarlo como se nos dice en esa escena final que nos quebra, por lo menos a mi si.
Calificación: Notable