Isla de Perros o como lo avisa su juego de palabras en el idioma original, el titulo se puede escuchar como I Love Dogs, deja claro lo que piensa el director sobre los perros, y mas aun sobre los humanos, todos los caninos son bondadosos y nobles y pueden actuar mal pero sin ser maliciosos, en cambio los humanos mienten, engañan, manipulan, roban y asesinan sin escrúpulos, no todos, algunos son tan nobles que solo podemos admirarlos, pero lo que dice Wes Anderson ahi queda, pero como en su mundo nada es tan sencillo todos los personajes tienen esa dualidad que los hace tan sorpresivos y sorprendentes, ademas la historia principal que muchos llaman "simple" o sencilla esconde mucho mas de lo que parece, no solo en ella misma ya que no es tan simple como aparenta, también en los simbolismos que aunque algunos dicen tratan sobre el pasado la verdad es que estan mas presentes que nunca en este mundo globalizado donde los gobiernos y grandes empresas manipulan para lograr sus metas y beneficios sin importar a costa de que sea.
La película es totalmente reconocible como una de Anderson, tiene su sello en cada fotograma, su mano se ve en todo momento, desde los personajes y diseño precioso con reminiscencias hipster pero muy bonito todo, la artesanía con la que esta hecho todo, el uso de la paleta de colores que sirve perfectamente a la historia y remarca lo que sucede en el momento, y esos encuadres perfectos donde todo es simétrico y parece sacado de un cuadro preciosista, el director ha sabido construir un universo propio y totalmente reconocible hasta por personas a las que no les gusta, las criticas de las cintas estan divididas pero lo que nadie niega es el virtuosismo técnico, tanto en fotografía, diseño de producción y el movimiento absolutamente natural de este mundo en stop motion pero que de alguna forma nunca esconde ni niega su base, es decir esos cientos de personajes hechos a mano con decorados donde se nota el amor en cada milímetro y donde Anderson reniega de la tecnología, para entregarnos lo mas posible a mano.
Y es que ademas la perfección es palpable, con el pelaje de los perros moviéndose en todo momento, con ese aire que les mueve la ropa y que nos trasporta de inmediato ahi, donde vemos muchísimos personajes secundarios que tienen identidad propia sin ser clones, Anderson ha llevado el stop motion artesanal a un nuevo nivel. Por si fuera poco el director usa otros tipos de animación, ya sean esas pinturas estáticas con que se nos muestra el prologo o esa animación en segunda dimensión que vemos a través de las pantallas, que guardan su propio diseño para los personajes principales siempre respetando su esencia. por supuesto el diseño artístico también pasa por una obvia inspiración japonesa, sea por sus pinturas maestras, su diseño ancestral de dibujos, y el uso de una estética, donde ademas el director aprovecha para hacer múltiples homenajes a directores japoneses.
También eso sospecha el hábil profesor Watanabe (Akira Ito) que se esfuerza por desarrollar una vacuna aunque eso representa enfrentarse al gobierno, nosotros no sospechamos ya que sabemos con certeza lo que ocurre, con los varios enfrentamientos, y aunque la pelicula se decanta por la evolución de Chief el final depara varias sorpresas con peleas, persecuciones y una revolución estupendamente llevada, con muchos personajes maravillosos como Jupiter (F. Murray Abraham) y Oracle (Tilda Swinton) que nos regalan varios de los momentos mas hilarantes de la cinta, el humor es ácido, negro, naif, ridículo y a veces hasta escatologico, pero siempre inteligente, priorizando lo que vemos o lo que se dice, nunca se recurre al chiste fácil o resulton por lo que los mas pequeños se aburrirían bastante, no es tanto una película para niños y menos viendo los temas que trata, hay un asesinato que llega despues de una escena deslumbrante donde se prepara un sushi con una meticulosidad enfermiza, donde se nos habla de muchas cosas importantes a modo de parodia, y donde la cinta apuesta por terminar rindiendo honor a la respetable cultura japonesa donde los valores y la cultura es primordial.
Wes Anderson es un director mas que talentoso y lo vuelve a demostrar, es un virtuoso del cine en todo su espectro, que ademas toma una valiente decisión que nos mete mas en la cinta, los ladridos son traducidos, lo que hablan los humanos no, es decir que a menos que sepamos japones no podemos entender que sucede, bueno si, tanto como los perros y eso es lo interesante, entendemos que sucede, lo que quieren y buscan los humanos, pero siempre con limitantes, tanto como nuestros valerosos protagonistas que se diferencias por características extravagantes y divertidas, sumado a un reparto de voces de antologia, a los mencionados sumemos Frances McDormand, Harvey Keitel, Yoko Ono, Ken Watanabe, Akira Takayama, Anjelica Huston, Kara Hayward, etc, y una esplendorosa banda sonora de Alexandre Desplat que acompaña magníficamente a los acontecimientos en todo momento. El director ha logrado una hermosa cinta que traspira hermosura, perfección y un amor por la cultura japonesa y los perros que no puede dejar indiferente a nadie.
Calificación: Muy Bien