La segunda cinta de Matthew Vaughn es una subvaloradisima película de fantasía que es mucho mejor de lo que la critica intento decir y lo que castigaron sus números en taquilla, acabo de verla y ha envejecido magníficamente, estamos ante una imaginativa aventura que toma derroteros por la fantasía, el humor negro y ácido, el romance mas clásico y una producción extraordinaria, todo esto formado por un reparto coral que cumple con creces, la cinta derrocha magia y en parte es debido a esto, hasta los papeles mas cortos, mas no pequeños, son realizados por actores de gran nivel, la mayoria ingleses y algunos norteamericanos que no estorban debido a que tienen gran talento y una belleza irrefutable, y lo otro es que todos estan desatados, teatrales, hilarantes, se nota que se la pasaron bien haciendo la cinta.
Con esto pareciera que solo estoy diciendo que la cinta es simpática y hasta ahi, nada mas lejos de la realidad, si lo es, pero con una historia obscura que da mensajes a los pequeños, no solo para pequeños y quizá algunas personas acostumbradas al cine gringo infantil la sientan muy oscura pero la realidad es que es inteligente y con buenos mensaje, y tan bien llevados que hasta un servidor se sintió conmovido en el bellisimo final y en algunas escenas antes también, ademas como apunte antes la cinta ha envejecido bastante bien, los efectos especiales son tan bien logrados que no se notan los años que llevan a cuesta, esto debido a una producción magnifica y una fotografía hermosa de Ben Davis que siempre esta al servicio de la historia, y ademas con un preciso montaje de Jon Harris que nos avanza al ritmo correcto y esa banda sonora exquisita de IIan Eshkeri.
En cuanto a los logros del director no solo esta supervisar todo lo que he mencionado sino el atreverse con una historia de Neil Gaiman que ademas el mismo ayudo a adaptar depurando y haciendo los cambios pertinentes, y por supuesto con ese humor negro y mala leche que lo caracteriza, ademas el ritmo que le da a la cinta es el adecuado, con un tono que va de lo sombrío a lo luminoso con gran capacidad, siempre dando el tono y el color adecuado a la escena, ademas con mucho tino a la hora de elegir el reparto. Al inicio de la cinta el narrador (voz de Ian McKellen) nos realiza una pregunta filosofal para decir que la importante es la que nadie se hace, de la que se ríen los científicos y nos lleva al pueblo de Wall donde Dunstan Thorn (Ben Barnes) engaña al guardia (David Kelly) para constatar que son verdad las leyendas que dicen que pasándolo se entra a un mundo mágico.
Ahi se topa con un pintoresco mercado que es magico para él y donde se enamora a primera vista de una princesa prisionera (Kate Magowan) y que ademas es correspondido, no puede liberarla de la bruja (Melanie Hill, hilarantemente despreciable) pero lo que sucede le deja nueve meses despues una canasta con un bebe llamado Tristan, eso es solo el inicio ya que años despues el joven Tristan (Charlie Cox) quiere convertirse en hombre conquistando el corazón hermoso pero frio de Victoria (Sienna Miller, bastante bien), la chica solo se ríe y aprovecha de él mientras respeta los avances de Humphrey (un joven Henry Cavill) y esta a la espera de aceptar su proposición de matrimonio con anillo caro incluido, de nada le sirve a Tristan perder empleo o gastar sus ahorros, en tanto del otro lado del muro el rey de Stormhold (Peter O'Toole, robándose la escena) esta a punto de fallecer pero como tiene varios hijos en pie decide mandar a los cielos un collar, el primero que lo encuentre sera el rey.
El collar tumba a la estrella Yvaine (preciosa Claire Danes con una belleza eterea y luciendo su talento) y gracias a ello Tristan le promete a Victoria llevarle la estrella a cambio de su mano, las brujas Lamia (Michelle Pfeiffer, tan hilarante como hermosa en plan chocarrero y hasta autoparodico), Empusa (Sarah Alexander) y Momo (Joanna Scanlan) ven caer la estrella y se dirigen a tomar su corazón para rejuvener y seguir alargando su vida, en tanto Tristan no puede pasar por el muro pero su padre por fin le cuenta su pasado y una vela magica que lo lleva al lado de la estrella, ahora puede cumplir su promesa con Victoria prometiendo regresar a Yvaine al cielo, pero esto no sera sencillo, en su camino los dos apenas se soportan y se toparan con un grupo de hermanos que llevan el espíritu shakesperiano al limite matándose unos a otros para ser rey, con Lamia haciendo maleficios y levantando engaños de manera maquiavelica, con un unicornio que intenta ayudar a la estrella, con la bruja que tiene a la madre esclavizada metiéndose de metiche, con una visita mortal a una demoníaca posada, con unos piratas que cazan rayos y su temible capitán Shakespeare (Robert de Niro hilarante) que en cierto momento sera descubierto por el ambicioso Septimus (Mark Strong) dentro de su armario, y bueno aunque sabemos lo que ocurrirá, es decir que Tristan e Yvaine encontraran su verdadero amor, todo es emocionante, logrado, tanto que los minutos finales, esos donde el romance con una grandisima Danes han ganado la partida dan paso a un emocionante e hilarante final que da tanto risa como escalofríos y donde "gracias a Dios", el final es tan hermoso que uno termina sonriendo de oreja a oreja.
Calificación: Muy Bien