Pablo Larraín se estrena en hollywood con una biopic que no esta hecha con los esquemas que marca la industria, desde ahi Larraín nos muestra que no abandonara su estilo a pesar de estar dentro de la industria con el manual mas preestablecido, ademas es de aplaudirle que no se dedico a hacerle halagos ni a poner como a una santa a una de las mujeres mas queridas por los norteamericanos, la respeta y la admira como lo demuestra con la cinta, pero también le tiene algo de aversión a esta mujer que estaba mas preocupada por las formas y el estilo que por lo que esta bien y la verdad. Narrada en forma arriesgada saltando de tiempo en tiempo pero y siempre tomando como base unas conversaciones que sostuvo la ex primera dama, y por supuesto que el director logra una buena recreación de epoca con el dinero de la industria y su talento sigue inobjetable como lo muestra con esas escenas que aparentan ser documentales porque estan calcadas, por el hábil manejo del encuadre, de actores y un montaje exacto.
La historia del sentir, lo que realizo y quien es la primera dama se nos muestra con tres entrevistas, por un lado una semana despues del atentado un periodista (Billy Crudup) entrevista a Jackie (Natalie Portman, portentosa siendo la verdadera Jackie, sus modos, su voz, sus ademanes, sus gestos, merecidas nominaciones y halagos por doquier), es así que la viuda le dice cuenta al reportero su vida, sus logros, los de su esposo, su futuro y por supuesto le impone que pondrá y que no escribirá, por ejemplo ella no fuma por mas que los termine como condenada, las infidelidades de su marido ni deben ser mencionadas, pero si lo que se iba a lograr y ese país mágico en el que se había convertido la casa blanca donde se escuchaba el musical camelot todo el día.
La entrevista todavía mas actuada donde la primera dama abría las puertas de la casa blanca "la casa del pueblo" para mostrarle al publico lo que estaba haciendo, la remodelacion en la que gastaba tanto dinero, en esa casa donde daba tantas fiestas y escuchaba conciertos de talentosos músicos, y la mas interesante, la confesión/conversación con un sacerdote (grande John Hurt) donde por única vez la primera dama reclama, se queja, de resquebraja, llora, no entiende porque Dios le impuso una losa tan pesada y finalmente comprende de manera sumisa que debe soportar lo que le toco, de igual manera la mujer solo se vuelve humana cuando recuerda el asesinato de su esposo, quizá ese es el problema de la cinta, Jackie es tan fría y calculadora, nunca pierde la clase y el porte, y eso causa que no podamos acercarnos a ella porque se preocupas mas por tener un funeral rocambolesco que por el sentir de una nación con miedo o por encontrar la verdad.
Calificación: Bien