Blake Lively en todo momento con bikini, una gaviota acompañante y un tiburón tenaz que quiere merendarsela (¿y quien no?) son los ingredientes de esta formula que termina siendo muy entretenida por mas que algunos le tiren hasta con la cubeta, la culpan de muy americana pero son los mismos que van a ver a Iron Man y Capitan América al cine, supongo que en esta epoca lo de moda deja de ser malo en cualquier sentido, total ya en su momento recapacitaran, no se puede ser idiota toda la vida, volviendo a la cinta es una palomera y entretenida cinta con un guion sencillo pero eficaz, una hermosa fotografía, una bonita playa, y una preciosa protagonista que ademas lo hace muy bien, Lively no solo le echa ganas sino que logra que en verdad le creamos que esta luchando desesperadamente por su vida, es decir se preocupa mas por actuar que por lucir bien, aunque como aquí nos damos cuenta ella no debe hacer nada para lucir radiante.
Nancy (Blake Lively, exquisita y acertada) se dirige a una playa secreta en México, la misma que visito su madre años atrás, por fin la ha encontrado en su viaje y no le importa ir sola ya que su amiga sufre una horrible resaca, su padre le pide que regrese pero Nancy todavía no supera la muerte de su madre e incluso ha abandonado sus estudios, en la playa se topa con dos chicos que le hacen fiesta pero ella apenas los pela, despues de un descanso decide surfear un poco mas mientras los chicos ya se retiran, la chica es atacada por un tiburón blanco del que apenas vemos su sombra, y despues toma un bocado de la chica, esta apenas llega a una roca que ira desapareciendo con la marea, brincos al cadáver de una ballena, platicas con una gaviota (Steven Seagull) que mas que mascota funciona como el balón "Wilson" de "Cast Away", curaciones al estilo cinematográfico y por supuesto el típico borracho mexicano que por robar a la chica termina siendo devorado, o por lo menos la mitad.
Después los dos chicos pesados del inicio son devorados, bravo por el tiburón y gracias, mientras la chica se juega sus ultimas cartas en la boya donde ella y el tiburón se dan con todo, lastima del final facilon ya que Jaume Collet-Serra habia jugado bien sus cartas, con esos momentos de tensión, la fascinante fotografía, una protagonista perfecta para el papel, y ese sugerir antes de mostrar de todo el inicio donde la tensión se respira y se siente, pero a final de cuentas un final hollywoodense, supongo que esperaba algo mas real, eso si, el tiburón mecatronico funciona de maravilla, no asi el computarizado, no veo de donde es tan mala la cinta, es entretenida, divertida, con humor mala leche, sentimental cuando debe, con una mujer radiante deleitándonos la pupila, producción artesanal cuando debe, bien filmada y tan corta que apenas la saboreamos cuando termina, no deja que su premisa se agote, un palomazo de lujo que nos lleva al terror mas sencillo y eficaz.
Calificación: Vale la Pena