Fruslerias: Pedro Infante

Pedro Infante, el ídolo de Guamúchil que no era de Guamúchil. Tengo a la visa su acta de nacimiento. Es la número 570 del libro 1 de nacimientos, del registro civil de Mazatlán, Sinaloa. La levantó el oficial Hermenegildo Ferreiro el 6 de diciembre de 1917, a las 11:20 de la mañana. El niño Pedro nació en la calle Constitución número 508, puerto de Mazatlán. Fueron sus padres Delfino Infante, filarmónico de 36 años, y su madre Refugio Cruz, de 26. Sus abuelos paternos fueron Bleno Infante y Sinforiana García. Sus abuelos maternos, Domingo Cruz y Catalina Aranda. Todos ellos, oriundos de la zona de El Rosario, al sur del estado, donde no mucho después nacería otra gloria del canto vernáculo nacional: Lola Beltrán.Ya metidos en la trivia mazatleca, Encuentro que en 1912 coincidieron en la autoridad ejecutiva (organización anterior a la de presidencia municipal) un López Portillo y un Gortari: Máximo y Alberto, respectivamente. Antes de eso, en 1910, ocupó esa plaza el gran poeta Enrique González Martínez que hoy compone sonetos en la rotonda de los hombres ilustres. Y un poco después, en 1914, un Francisco Labastida Anguiano.

Durante todos esos años era un hecho conocido (no festejado, pero reconocido) que había quemaderos de opio en el puerto, regenteados por colonos chinos (de los cuales había 19 hombres y ninguna mujer en el censo de 1891), frecuentados por la bohemia, el rito y la vagancia.Y mientras mi tía Amelia está por cumplir cien años, la cervecería del Pacífico acaba de cumplir 101. Pero así como me siento obligado a desilusionar a mis vecinos guamuchilenes en lo de Pedro Infante, igualmente tengo que decepcionar a mis paisanos mazatlecos (patasaladas) en cuanto a la cerveza Pacífico. Según una fuente absolutamente irreprochable y enterada, es la misma que la Corona: en ingredientes y en proceso. Lo que pasa, dice esa ave autorizada de mal agüero, es que los mazatlecos son fetichistas y les gusta ver el sello con el ancla en la etiqueta.