Magnifica película opera prima del maestro George Romero que popularizo a los zombis aunque para ser franco Romero no lo pensó asi sino que como en el titulo y los otros posibles simplemente hacían alusión a muertos vivientes o devoradores de sangre, y eso es porque lo que le interesa al director es su discurso/critica/mensaje político/social/humano aprovechando instrumentos como los de los atacantes zombis que asolan al mundo para mostrar como son en realidad las personas la sociedad y el gobierno. Asi que cada personaje representa a una parte de la sociedad y al mismo tiempo vemos la apatía y malas decisiones del gobierno contra una amenaza que comienza a desmoronar la humanidad de todas las personas, y no solo eso sino que además el gobierno es el culpable del problema dejando a todos los demás como simples conejillos de india indefensos contra un problema que nadie puede ni quiere entender y que despedaza la supuesta realidad en la que todos viven acostumbrados.
La cinta comienza con unas excelentes tomas de un automóvil en un camino hasta que llegan a un cementerio, todo esto en total soledad mostrándonos como nos sentimos en la sociedad, Barbra (Judith O'Dea, bastante bien) no se siente bien en el cementerio debido a los miedos que siente y que su hermano Johnny (Russell Streiner) aprovecha para asustarla, inmediatamente vemos a alguien acercarse caminando erráticamente y cuando pasa al lado de Barbra la ataca siendo protegida por su hermano a quien deja a su suerte para escapar en el automóvil hasta una granja cercana donde se refugia y adonde empiezan a llegar los zombis poco a poco, tiempo después llega Ben (Duane Jones, bien) quien inmediatamente comprende la situación y decide proteger los puntos débiles de la casa y matar a cuanto muerto viviente pueda, Barbra simplemente esta en estado catatónico, en un shock que no le permite pensar ni actuar bien, dos modos diferentes de pensar y comportarse frente a una amenaza y que representa dos lados de la sociedad y de las personas que no necesariamente tengan motivos raciales o de genero como algunos ven.
Tiempo después aparecen dos tipos más que estaban refugiados en el sótano y que disciernen con el modo de actuar de Ben, ahi abajo hay más personas que si se unieran pudieran tener una oportunidad de sobrevivir pero que tienen su peor enemigo en las rencillas y diferencias que tienen, algo tan humano que por ello da asco y nos hace preguntar porque la necesidad de ser el que manda o cerrarse a su pensamiento, el mezquino Harry Cooper (Karl Hardman), su cerrada esposa Helen (Marilyn Eastman), el blando Tom (Keith Wayne), la impulsiva Judy (Judith Ridley), y la niña enferma/lastimada Karen (Kyra Schon) que como sabemos representa una amenaza para todos conforme se va rebelando más información respecto a la rara enfermedad que comenzó debido a cierto virus que trajo de venus un satélite del gobierno que al tratar de ocultarlo simplemente se vio rebasado por la situación y despues no supo que hacer, claro que al final toma la decisión obvia pero tan mal planificada y realizada que termina siendo una amenaza igual o peor para la sociedad de lo que era el ataque de los muertos vivientes, quiero decir que un estúpido armado es peor que un cadáver caminante con ansias de carne.
El mismo George Romero ha dicho que todo ese mundo que ha creado y que se ha popularizado cada vez más es simplemente un medio para lo que tiene que decir y debo admitir que los zombis funcionan muy bien para hacer todo este tipo de discursos, asi que desde el automóvil bajando por el camino hasta los desquiciantes créditos finales la situación siempre tiene un trasfondo tan bien cuidado y planteado por Romero que todavía sigue teniendo la misma validez en la actualidad, o quizá tenga más ahora que vivimos en una época donde las diferencias políticas, sociales, monetarias y de poder son cada vez más grandes, además el hecho de que haya sido grabado con tan poco financiamiento ayuda a que todo se use y haga de manera adecuada en lugar de hacer florituras y aspavientos, asi que los zombis solo aparecen cuando deben, los efectos son sencillos y por ello siguen funcionando, y hay algunas escenas y tomas tan sucias y cinicas que solo pudieron ser grabadas en una cinta independiente como en la que se comen a dos personajes asados con toda la mala leche del mundo en una escena que da repugnancia, miedo, asombro y hasta risa en un conjunto genial.
Claro que para las nuevas generaciones la cinta pudiera parecer lenta, en un elegante blanco y negro que tiene grano, con algunos errores de edición que solo servirán para que digan que como dicen que es una cinta tan buena, con un ritmo pausado que va reverberando poco a poco y al que no están acostumbrados, e incluso que el mismo Romero se traiciona con la velocidad e inteligencia de los zombis que en esta cinta es superior a la adecuadamente romántica que se después uso, muestra de ello la rapidez del primer zombi en aparecer, pero para los fanáticos del terror como quien esto escribe no queda más que decir que estamos ante una obra maestra a la que no le sobra ni le falta un segundo y que se presta a múltiples interpretaciones y debates y que da más miedo por su discurso que tiene que ver directamente con el desenlace que por sus voraces monstruos, y una obra que tiene tanta repercusión que les sirvió de inspiración a otros grandes maestros del genero, y que pese a quien le pese también es la base de todas las cintas y series del genero, larga vida al maestro Romero y esta obra inmortal.
El mismo George Romero ha dicho que todo ese mundo que ha creado y que se ha popularizado cada vez más es simplemente un medio para lo que tiene que decir y debo admitir que los zombis funcionan muy bien para hacer todo este tipo de discursos, asi que desde el automóvil bajando por el camino hasta los desquiciantes créditos finales la situación siempre tiene un trasfondo tan bien cuidado y planteado por Romero que todavía sigue teniendo la misma validez en la actualidad, o quizá tenga más ahora que vivimos en una época donde las diferencias políticas, sociales, monetarias y de poder son cada vez más grandes, además el hecho de que haya sido grabado con tan poco financiamiento ayuda a que todo se use y haga de manera adecuada en lugar de hacer florituras y aspavientos, asi que los zombis solo aparecen cuando deben, los efectos son sencillos y por ello siguen funcionando, y hay algunas escenas y tomas tan sucias y cinicas que solo pudieron ser grabadas en una cinta independiente como en la que se comen a dos personajes asados con toda la mala leche del mundo en una escena que da repugnancia, miedo, asombro y hasta risa en un conjunto genial.
Claro que para las nuevas generaciones la cinta pudiera parecer lenta, en un elegante blanco y negro que tiene grano, con algunos errores de edición que solo servirán para que digan que como dicen que es una cinta tan buena, con un ritmo pausado que va reverberando poco a poco y al que no están acostumbrados, e incluso que el mismo Romero se traiciona con la velocidad e inteligencia de los zombis que en esta cinta es superior a la adecuadamente romántica que se después uso, muestra de ello la rapidez del primer zombi en aparecer, pero para los fanáticos del terror como quien esto escribe no queda más que decir que estamos ante una obra maestra a la que no le sobra ni le falta un segundo y que se presta a múltiples interpretaciones y debates y que da más miedo por su discurso que tiene que ver directamente con el desenlace que por sus voraces monstruos, y una obra que tiene tanta repercusión que les sirvió de inspiración a otros grandes maestros del genero, y que pese a quien le pese también es la base de todas las cintas y series del genero, larga vida al maestro Romero y esta obra inmortal.
Calificación: Excelente