La desaparición de Yara (Chiara Bono) mueve los cimientos de la sociedad italiana, y es que la chica después de su entrenamiento la joven Yara se queda a ver a los chicos que entrenan bailes con permiso de su madre(Sandra Toffolatti), pero esta nunca regresa a casa causando la desesperación de su madre y el dolor de su padre(Mario Pirrello), todo el pueblo comienza a buscarla y el caso toma particular importancia con los medios de comunicación ejerciendo presión, la fiscal Letizia (Isabella Ragonese, bastante bien) realiza un a búsqueda e investigación que abarca desde el posible escape de la adolescente, venganza o el secuestro de la chica, basado en un caso real no puede negarse que el director Marco Tullio Giordana realizo la cinta con mucho respeto hacia la victima y su familia, esto la aleja demasiado de a como acostumbramos a ver este tipo de historias en el cine norteamericano, aquí no hay momentos de tensión, ni es un thriller, ni se usa el chantaje y la sobreactuación tan usual con la banda sonora exigiendo que nos pongamos tristes.
En lugar de esto la película decide exponer los hechos de la forma más realista y verídica (supongo) posible, esto causa que la historia y los personajes que vemos en pantalla nos parezcan reales, pero también un alejamiento con un toque de frialdad para con el espectador que quizá incomode a algunos acostumbrados a otro tipo de cine como apunte antes, la cinta se toma el tiempo para presentarnos a la chica, su familia y la relación entre ellos, y pone momentos puntuales donde se despierta una tensión y nerviosismo ya que sabemos lo que sucederá después, cuando Yara desaparece comienza la desesperada búsqueda y la investigación con Letizia, que representa, ahora si, ese personaje republicano de antaño con una abogada con una ética y moral intachable que ademas se toma su trabajo con tanto profesionalismo que termina obsesionada con resolver un caso que a todas luces rebasa el sistema judicial del país.
De hecho esto es lo mejor de la cinta, el personaje profesional obsesivo de la abogada y el militar (Alessio Boni) que a pesar de sus múltiples carencias en realidad quieren resolver el caso e intentan hacer lo mejor posible su trabajo, lo segundo mejor es el drama familiar que nunca cae en chantaje y finalmente una fotografía hermosa que rehuye la frialdad que casi siempre se usa en este tipo de temas, y una dirección artesanal que logra buenos encuadres, con una buena edición y un ritmo exacto que ayuda ademas en que no se alargue la película, y aunque la resolución final es interesante, el uso de una tecnología de ADN para resolver el caso, no es emocionante, si termina siendo satisfactorio, con todo lo polémico que es, al final uno aplaude el profesionalismo y la entrega de los involucrados, y finalmente me quedo pensando en como este caso puso de cabeza a Italia mientras que en mi querido país es cosa de todos los días al caso de volverse común, por desgracia.
Calificación: Vale la Pena