La pequeña Saraya quiere ser una niña "normal" lo que sea que eso signifique, algo complicado cuando tu familia tiene como modo de vida la lucha libre de la WWE, de manera inevitable la chica terminara dedicándose a lo mismo, ya adulta (Florence Pugh, en claro ascenso) la muchacha se ha convertido en una especie de rockera ruda que es popular entre los pocos fanáticos de la lucha libre en Norwich, Inglaterra, ya de por si tener a una pequeña chica dedicándose a la lucha libre es algo que no se ve mucho tener a una familia entera que lo haga menos, y aun menos en un idílico pueblito ingles, ahi la familia apenas gana para vivir pero hacen lo que les gusta, tienen una bonita escuela y el hijo Zak (Jack Lowden, bien) es el héroe local, no solo por sus movimientos y dedicación sino como dedicado maestro
El chico se enfrenta a sus futuros suegros (entre ellos el director y guionista Stephen Merchant) que deben aguantar al exagerado padre luchador (Nick Frost, tan carismático como siempre) y a la franca madre Soraya (Lena Headey) cuando les llega la llamada esperada, una audición para la WWE que termina en lo impensable, el rechazo de Zak y la admisión de Saraya que ahora es llamada Paige, el problema es que la chica no esta segura de lo que quiere, se siente culpable por el fracaso de su hermano y es tratada como un bicho raro, una chica pálida y dark que no empata con esas rubias despampanantes que parecen supermodelos, en tanto Zak cae en una depresión de la que no puede salir, hasta aquí pareciera que estoy hablando de un drama pero el inteligente guion de Mechant con ese típico humor ingles y esos actores serios disfrutando su humor nos llevan de la mano, lo disfrutamos, y si le sumamos a Vince Vaughn como el cínico y rudo entrenador no hay fallo.
Al final tenemos un comercial, como muchos otras películas, esta vez un comercial mas de la WWE con todo y cameo del productor "The Rock" pero que por fin nos regala una película buena, con un buen mensaje, con una narración bien hecha y personajes encomiables, y por supuesto, un reparto de lujo donde brilla sobretodo Florence Pugh que no solo es una excelente actriz sino que tiene carisma y se entrega en todo lo que hace, esta vez en un trabajo mas físico y con un personaje diferente, una biopic de una familia extravagante que deja un buen sabor de boca a pesar de ya saber como terminara y que increíblemente viene del otro lado del charco cuando la lucha libre es tan americana.
Calificación: Vale la Pena