Otro falso documental con un ataque apocalíptico que por desgracia son muy parecidos a los zombies, en pocas palabras otra cinta mas que aprovecha una moda que parece tampoco va terminar y que define a la generación z, vista desde los ojos israelis, el problema es que ya cansa tanta cámara en mano y las mismas tramas, claro que aquí los directores Doron y Yoav Paz hacen que el uso de la cámara resulte muy practico, en lugar de lo poco creíble de que el tipo cargue con la cámara en situaciones de vida o muerte la protagonista usa unos lentes inteligentes que graban todo lo que ve y que como los ocupa por graduación no puede quitarselos, ademas tiene funciones que ayudan a amenizar viendo vídeos por internet o nos da datos rápidos y cruciales de los personajes, ademas gracias a ellos tenemos una buenísima toma final que por mucho es lo mejor del filme.
Sarah (Danielle Jadelyn) es una joven judía de nivel alto que ira de vacaciones a Israel para tratar de dejar atrás el fallecimiento de su hermano, la acompaña Rachel (bella Yael Grobglas) quien a diferencia de Sarah es una destrampada, conocen al arqueólogo hippie Kevin (Yon Tumarkin) y este los convence de llegar primero a Jerusalén donde primero se la pasan muy bien, conocen el pintoresco lugar, los lugares sagrados, se encantan con todos los idiotas que las pretenden, caen con los mas idiotas, viven en los lugares de juerga y en algún momento Kevin se pone paranoico, un extraño vídeo muestra un pasado raro, y cuando el tipo descubre todo lo mandan al loquero, en eso se desata un apocalipsis bíblico y son asediados por militares.
Intentan escapar y terminan cayendo uno a uno mientras los demonios zombies y algunos demonios mas hacen un pandemónium del lugar, al final todo termina en esa mencionada buen escena final donde vemos que no hay salida, el final ya llego. El problema es que los personajes son detestables y uno desea que mueran de la peor forma posible, ni siquiera hay esa satisfacción, son objetos para ese final pero ni asi es perdonable, los efectos malos, la edición buena, las actuaciones dispares, la historia hace aguas en todos lados, se supone que Kevin sabría que pasaría y porque y de pronto se le olvida, en fin esperemos que se deje descansar este subgénero.
Calificación: Mediocre