¡SALVE, CESAR! (HAIL, CAESAR!, EU, 2015)
Hacia el final de la cinta el trabajador, dedicado y creyente Eddie Mannix (Magnifico Josh Brolin) le dice a su estrella Baird Whitlock (George Clooney, bien) que salga y sea una estrella, esa fe que le tiene Mannix al cine, a sus estrellas, al estudio, a la magia que puede lograr nos es transmitida y nos contagia, al igual que lo hacen Joel y Ethan Coen en toda la cinta con sus homenajes/parodias/saqueos de los generos que se usaban en la epoca de los cincuenta por los grandes estudios, Eddie Mannix se encarga de cuidar, mediar y cubrir a las estrellas de su estudio que son descuidados, promiscuos, patanes o simplemente estúpidos, asi vemos como el tipo ni siquiera duerme por salvar la reputación de una chica tomándose fotos inmorales, y como un devoto católico se confiesa cada que tenga oportunidad dejando pasar menos de un día, en el estudio se esta haciendo una superproducción romana con mensaje religioso y mientras Mannix ve que la cinta no ofenda a ninguna religión en una delirante reunión con lideres católicos, judíos, protestantes y ortodoxos la estrella Whitlock es secuestrado por dos extras que lo llevan a una casa en la playa donde un grupo que se hace llamar el futuro comienzan a contarle las maravillas del comunismo y como el cine es capitalista y lo usa, como el grupo esta formado por escritores como los mismos Coen el resultado es por demás divertido.
Se piden cien mil pesos de rescate y Mannix los espera de su contador mientras resuelve todos los problemas que van surgiendo en el estudio, que el mero jefe llama para que el vaquero cantante Hobie Doyle (Alden Ehrenreich) sea la estrella de un drama de salón dirigido por el distinguido Laurence Laurentz (Ralph Fiennes, estupendo) quien no soporta la idea, lidiar con el embarazo de la bella e "inocente" estrella de musical acuatico DeeAnna Moran (Scarlett Johansson perfecta como facilona de arrabal) quien o se casa o aprovechan una laguna legal para que adopte a su propio hijo, aprovechar los problemas de una tormenta que acosa a una producción, navegar a dos gemelas reporteras de chismorreo (Tilda Swinton, muy bien) que no dudan en destruir carreras con tal de tener mas lectores, y mientras eso sucede somos testigos de un bellisimo musical acuatico con Johansson como estrella, de una exagerada balacera de vaqueros, de una divertida escena de humor con canción de fondo que carcajea al respetable, de un fascinante bailable de marineros con mensaje homoerotico que resulta hilarante con Burt Gurney (Channing Tatum, esplendido), donde los Coen no se mofan de ellos sino que demuestran su admiración y amor por ese cine ya olvidado.
En tanto Whitlock esta siendo convencido por los comunistas de que su sistema es el mejor y que debe rebelarse, de hecho uno de sus lideres ya esta metido en el estudio, la parte de film noir explota cuando Doyle sigue una pista que ve en su cena con Carlotta Valdez (Veronica Osorio) que lo llevara a descubrir la verdad detrás del complot, por supuesto que esto no es lo que les interesa a los Coen por mas que lo cierren de manera impecable en el mar, lo que les importa es hacer una carta de amor al cine, de demostrar que tienen fe y que como el buen Mannix, piensan que el cine es importante, que se debe entretener al respetable con calidad e inteligencia, que el buen cine existió y todavía puede existir, y en lo personal me lo han vendido, su nostalgia por ese cine de antaño y por el creer que el buen cine todavía existe, como Mannix que cree fervientemente en Dios sin necesidad de una religión como intermediario, asi mismo cree Mannix en el cine, solo tiene fe en que lo que esta haciendo es valioso y mucho mas importante que un empleo bien remunerado, mas tranquilo y que es el futuro, Mannix no cambiaría la magia del cine por nada y por fortuna para nosotros los Coen tampoco.
A eso sumemosle guiños al por mayor, las estrellas que tienen su contraparte real, los chismorreos que son sacados de chismes reales de la epoca, homenajes aquí y allá como el nombre de la acompañante de Doyle, con una fotografia y música exquisita, con el vestuario y la producción impecables, con cameos aquí y allá, con un reparto lleno de talento que ademas de los mencionados tiene a Frances McDormand, jonah Hill, Alison Pill, Wayne Knight, Christopher Lambert, Robert Picardo, Dolph Lundgren, Clancy Brown, y un largo etcétera acompañados de la voz de Michael Gambon, una encendida y excelente forma de mostrar que el cine, el buen cine, todavía existe, solo hay que mantener la fe.
Calificación: Muy Bien