Si en su cinta anterior Luis Estrada atacaba al sistema politico mexicano, en esta va más alla ya que ataca al sistema politico, a la sociedad, a la iglesia catolica, y al individuo mexicano, por desgracia la cinta divaga demasiado, a veces se pierde de tal manera que a uno simplemente no le importa lo que sucede en ese momento, de hecho hay momentos de autentico bostezo, claro que tambien hay momentos muy divertidos e incluso alguno que otro de buen cine, la cinta es una especie de satira/parodia del sistema de vida mexicana, que se alarga por dos horas cuando en realidad no le hubiera hecho daño durar media hora menos, logrando buenas puntadas y juntando un reparto de grandes actores mexicanos de la "nueva generación", aunque la cinta se la lleva Damián Alcázar al igual que en la anterior cinta de Estrada.
Y de que va? Juan Perez (Damián Alcázar, magnifico) es un vagabundo teporocho al que solo le preocupa conseguir su alcohol y conquistar a Rosita (Cecilia Suarez), claro que para conseguir a la chica debe de hacerse con una casa y con un trabajo, Juan le promete que lo va a lograr aunque nunca hace nada para que se haga realidad, pero debido a que ahora es una celebridad debido a que se quedo en una cornisa y fue catalogado como un suicida debido a la miseria en la que vive, nada más alejado de la realidad, de cualquier manera el director (Pedro Armendariz Jr. de nuevo en un papel a su medida) de un periodico de izquierda aprovecha la ocasión para atacar al secretario de hacienda (Antonio Serrano, bien), por lo que este se ve obligado a rescatar a Juan de la pobreza, darle empleo, casa y con ello hacer realidad su sueño.
Claro que los demás vagabundos empiezan a copiarlo para pedir cosas, asi que el gobierno decide acabar todo y meterlos a la carcel, tres años despues Juan sale pensando en la venganza, cosa imposible de alcanzar ya que el secretario es todopoderoso en México, asi que Juan decide seguir el estilo de vida que el gobierno les obliga a vivir, asi en un final de antologia vemos al secretario recibir un premio internacional ya que no hay pobres en México ¿? en tanto Juan junto a sus compadres vagabundos, Rosita y su hijo ha encontrado la felicidad en una escena final con toma abriendose y mostrandonos la realidad en la que vivimos, un final amoral, crudo, terrible, con humor negro mientras suena "What a Wonderful World" de Louis Armstrong, un final memorable para una cinta quebrada.
Calificación: Bien
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