Gordon (un brillante Peter Mullan) es dueño de una empresa que se dedica a limpiar los residuos de asbesto de antiguos edificios, acaba de convertirse en padre y la empresa tiene problemas financieros por lo que consigue el trabajo de limpiar un antiguo manicomio que se convertira en edificio gubernamental en un tiempo limite casi imposible, pero el necesita el dinero y desde el inicio vemos que sufre una especie de depresión post-parto, su mejor amigo Phil (David Caruso, muy bien) comenta que el nunca quiso tener niños pero su mujer lo presiono a ello, asi el equipo conformado por el estresado Gordon, el enojado Phil que no soporta al valemadrista de Hank (Josh Lucas) debido a que le robo la mujer, el brillante Mike (Stephen Gevedon) que piensa ser abogado y el jovencito Jeff (Brendan Sexton III), sobrino de Gordon y que sufre de escotofobia.
Frente a este cóctel nada bueno puede avecinarse, Gordon apenas puede con el estres, Phil y Hank se odian y cada que estan cerca casi llegan a los golpes, Mike se siente cansado de este trabajo y añora algo mejor, algo que sea digno de su cerebro, Jeff no soporta la oscuridad, y todo esto en medio de cargas de trabajo que resultan ya de por si desquiciantes, sumemosle lo que dice Hank al chico en cierta escena clave, el asbesto se va a tu cerebro y lo afecta, de tal forma que puede dañarte permanentemente, debes tener un plan de escape para esto, Gordon llega a su casa pero no se baja mientras mira la puerta expectante, mas adelante sabemos que ha tenido un incidente violento con su mujer y no sabe que hacer con la culpa, Phil se lamenta por su novia perdida y siempre esta irritable e iracundo, incluso realiza acciones sospechosas, Hank solo vaguea y busca un tesoro que lo ayude a escapar de ahi, Jeff carga con trabajo de mas mientras es maniatado por los demas, y Mike se obsesiona con unas cintas de sesiones grabadas sobre una tal Mary Hobbes que estaba recluida en el lugar hace muchos años.
Estas cintas resultan clave para entender la cinta, lo que escuchamos que le sucedió a Mary con sus múltiples personalidades; Princesa, Billy y Simon son una muestra clara de la quebrada mentalidad humana que nos afecta a cada uno de nosotros. La puesta en escena de Brad Anderson es impresionante, el tipo logra que en todo momento nos sintamos tensionados y sin saber que esperar, nos mantiene el misterio durante toda la cinta, sabemos que algo raro sucede pero apenas entendemos que, esta muestra de terror psicológico donde al final todo embona es una muestra del inteligente guión escrito por el director Anderson y su actor Gevedon, donde no se hace trampa ni se apela a sustos baratos sino a la construccion de un ambiente opresivo y tenebroso, sin tener que recurrir a la oscuridad ni a espacios cerrados, despues de todo el manicomio esta lleno de lugares amplios y grandes con mucha luz y casi toda la cinta sucede durante el día, todo esto logrado con una ambientación y un trabajo de cámara prodigioso, al que se une un gran sonido y una banda sonora maravillosa, y algunas escenas brillantemente filmadas, donde se nos recuerda que lo mas terrorífico es la compleja mente humana, donde Simon vive en los débiles y los heridos.
Calificación: Muy Bien