Arlen (Suki Waterhouse) es sacada de una patada de EU y de inmediato la aprisionan para comérsela, eso si, a trozos, faltaba mas, primero un brazo, de ahí una pierna, y luego quien sabe porque solo vemos comidos hasta ese nivel, quizá despues de eso los dejan vivir como paraplejicos, por ahí conocemos al artista canibal Miami Man (Jason Momoa posando, sin actuar por supuesto y con un español de pena ajena) que ademas de matar y cocinar cristianos le hace dibujitos a su hija supongo, despues Arlen llega a un pueblillo conocido como "Comfort" donde la chica vive agusto, con casa y todo sin que nunca le veamos trabajar, pero no se siente agusto, va a vengarse y consigue a la pequeña a quien ahora cria, el papa de la niña la busca por el desierto, se encuentra con Jim Carrey quien es el unico que se salva de esta chamusquina y le hace un retrato.
En "Comfort" Arlen sueña con ser normal, luego se da cuenta que vivir con tantos lujos no vale la pena si debe idolatrar a un escobar región 4 (Keanu Reeves), por ahí también aparece Giovanni Ribisi como un extra sin sentido, supongo que como Reeves tenia que pagar alguna cuenta, la chica es atrapada por Miami Man, luego la chica regresa a rescatar a la niña y resulta que todo era una historia de amor de la chica sin amor propio con el tipo que le comió las extremidades, lo cual no tiene nada de malo, pero si que el romance se sienta forzado y sin trabajo, y es que entiendo el alegato de la directora Ana Lily Amirpour contra el gobierno de los Estados Unidos con esa critica a la inmigración y a cerrar las fronteras.
Pero no trabaja bien esto, de hecho pareciera que le da la razón, del otro lado del muro solo hay caníbales fisicoculturistas, lideres mesiánicos, violencia para sobrevivir, y mujeres con el coco lavado que se embarazan por servir, todo esto con buenos efectos, una fotografía bonita, y una historia horrible escrita por la directora que no va a ningún lado, pareciera que no sabia que contar, y lo peor es lo pretencioso que es todo, una película que dura dos horas cuando cuanto mucho daba para un mediometraje, un desastroso despropósito que resulta tan aburrido como desesperante, y viniendo de una cinta que se trata de caníbales fisicoculturistas en un mundo dispotico significa mucho.
Calificación: Churrito