Robert Rossen fue perseguido por la cacería de brujas a los supuestos comunistas escondidos, Rossen es de ascendencia rusa y siempre tuvo inclinación por el comunismo perteneciendo a su partido por lo que se presto para que lo enjuiciaran y lo vetaran de los estudios a pesar de su gran trayectoria como guionista y a que justamente acabara de ganar el oscar con su tercer película que es justamente la que estoy tratando ahorita, esta cinta se puede entender como la respuesta de Rossen a las acusaciones de comunismo, pocas películas son tan antiamericanas y atacan tanto a la democracia como esta, es obvio que con ella el director pone de manifiesto que pensaba, cuestión muy diferente se debe aclarar, a que se sea comunista encubierto, por supuesto que la raíz de la idea viene del libro de Robert Penn Warren que según esta calcado algo sobre lo que no podría opinar porque "mea culpa" no lo he leído. Pero no toda la cinta es la ideología, el guion es estupendo, conciso, preciso, resumiendo una historia larguísima, lo mismo se puede decir de la dirección que tiene un ritmo vertiginoso y da en el punto haciendo uso Rossen de todos los medios posibles, tomas fijas, movimientos, superposiciones, acercamientos, voz en off, medios impresos para resumir sucesos y un largo etcétera, al que se unen un montaje extraordinario.
Pero yendo todavía mas allá gran parte de la grandeza de la cinta son las actuaciones, todos hacen un trabajo impecables, y Broderick Crawford esta perfecto como el cinico Willie Stark que se corrompe rápidamente y termina siendo peor que a los que el acusaba y se enfrentaba, esta perfecto como ese pobre diablo que empujado por su familia y el amor al pueblo es dominado por su ego que era lo que siempre lo movió y al tener el poder hizo todo lo posible para mantenerlo. Al inicio vemos al idealista Jack Burden (John Ireland, muy bien) ir a cubrir la campaña de Willie Stark (Broderick Crawford, magnifico) quien es un hombre honesto boicoteado por sus adversarios comandados por Tiny Duffy (Ralph Dumke), al final Willie pierde y se dedica a estudiar pero un terrible accidente activa la profesión de abogado acabando con los políticos corruptos, el partido decide postularlo para repartir los votos y Willie solo se da cuenta al final después de que la cínica Sadie (Mercedes McCambridge, excelente) suelta la sopa y lo embriaga dando Willie un discurso memorable con el que aun pierde pero como dice el mismo, aprendió a ganar.
La siguiente campaña es ganada fácilmente por Willie quien hace tratos con gente turbia y los mismos grupos favorecidos a los que antes despreciaba, hace a Jack su mano derecha buscando oscuros secretos para extorsionar a sus adversarios mientras que Sadie es la mente que conoce como moverse en el oscuro mundo de la política y tiene a un matón tartamudo a su lado en todo momento, incluso Tiny trabaja para el ahora, Willie construye hospitales, carreteras, presas pero al mismo tiempo se vuelve inmensamente rico, favorece a quien le conviene, acaba con familias, e inclusive le quita la novia a Jack, la hija del ex gobernador Anne Stanton (bellísima Joanne Dru) y deja paralitico a su hijo solo para acabar bien parado frente a la prensa, desapariciones, chantajes, muertes, torturas, robos, fraudes, son algo que se convierte en el dia a dia para Jack ya que Willie solo entiende esa manera de vivir, no perderá los lujos y el poder que tiene, ya no se trata de que esta bien o mal sino que desea, lo dicho, un descenso a los infiernos en el que nos queda la duda de si Willie se corrompió para llegar al poder, si el poder lo corrompió o si como le dice la única persona decente de la cinta siempre fue así, una película exquisita ganadora del oscar cuya única pega es que tiene un final demasiado abrupto pero que aun ahora es completamente actual, ¿Qué diferencia existe entre Willie Stark y los que manejan el país ahorita?
Calificación: Excelente