Carly (Carly Pope) vive con el peso de los delitos de su madre Angela (Nathalie Boltt), pero esta alejada totalmente de ella, hasta que un amigo de antaño la contacta y le dice que vio a su madre en un experimento donde colaboró, y que de hecho los encargados desean que ella vaya para ver si así puede reaccionar su madre ya que se encuentra en un extraño estado en el que ningún musculo le funciona al grado de necesitar un respirador al mismo tiempo que su mente esta funcionando a máxima capacidad, cuando llega al lugar entra en una simulación que al mismo tiempo es también la mente de su madre, cosa que aprovecha para espetarle su odio.
Lo extraño es que una calmada Angela solo lo acepta y le ruega que se vaya, por lo que Carly entra de nuevo solo para escuchar palabras de afecto y disculpas de Angela para luego ser poseída por un demonio con cabeza de cuervo que termina poseyendo a la misma Carly, con esta nueva información la protagonista comienza a investigar lo que nos da los lugares comunes de las pesadillas, las marcas demoniacas, el amigo que investigó todo sobre el tema y por ende tiene los datos necesarios, y el enfrentamiento final con exorcismo fallido incluido.
Todo esto aunque convencional no es malo, pero es narrado y montado de forma tan torpe que no pareciera Blonkamp el que esta detrás de cámaras, además de que se abandona la ciencia ficción del inicio para llegar a una genérica cinta de terror, por lo que todo eso del inicio parece solo una excusa barata para decir que la cinta es original, y hablando de barata ese mundo virtual y los efectos digitales son de baja calidad y muestran costuras, ese mundo virtual visto desde arriba cual simulador de vida, a pesar de las buenas intenciones y los experimentos visuales, que en ciertos momentos dan en el blanco en lo virtual, poco más tiene que ofrecer esta fallida película.
Calificación: Mediocre