Chen Nian (Zhou Dongyu, muy bien) es una chica estudiosa de escasos recursos cuya madre perseguida por deudores deposita todas sus esperanzas, la chica se esfuerza al máximo pero un suicido causa que todo cambie, cuando se suicida una compañera y amiga, la misma Chen se convierte en el blanco de abusos en el instituto por parte de Wei Lai (Zhou Ye) y su grupo que no solo parecen intocables debido a su alto estatus social, sino que ademas cuentan con el apoyo de todos en medios digitales como redes sociales, faltan sesenta días para el gaokao, un examen que decide el futuro de todos los aspirantes, Chen Nian intenta sobrellevar esto por consejo de sus amigos pero llega a un punto tal que parece no podrá con eso, hasta que en cierto momento conoce a Liu Beishan (Jackson Yee, bien), un delincuente que para pagarle el favor a la chica se convierte en su protector.
Esto desata una ola de violenta y ataques cada vez mas grandes, que terminan por desembocar en violencia física, en tanto los dos muchachos empiezan a comprenderse y quererse, cuando el amor se despierta la cinta cambia de piel a como venia mostrando la fotografía y los escenarios, a un thriller con aire de cine negro donde el crimen, la policía, y las pistas toman un papel crucial mientras los dos protagonistas tratan de sobrevivir y ser felices. Tsang filma con energía y convencido de lo que hace, y aunque al inicio el diseño tan tétrico de la fotografía solo parece estar para ponernos mas deprimidos en esta denuncia social lo cierto es que este se comprende cabalmente hasta el cambio de aire de la cinta que nunca deja de ser una historia romántica, las actuaciones de prácticamente todo el reparto son impecables y el ritmo aunque se siente irregular es algo propio de las producciones orientales.
La banda sonora merece mención aparte, ayudando mucho a meternos en los personajes y las situaciones, aunque la cinta es una obvia denuncia social y critica a los jóvenes con sus redes sociales y tecnología, va mas allá del acoso escolar o bullying, o los huérfanos que solo pueden terminar en pandillas, ya que ataca el mismo corazón del sistema que crea problemas y presión en una nación de por si estresada, ademas de poner el dedo en la llaga, dejando claro que ni la policía, ni los padres y mucho menos los maestros pueden atacar un problema que en primer lugar pareciera ni siquiera interesarles, pero aun, y sin tener nada de esto como telón de fondo, estamos ante una buena cinta dramática, romance y un toque de thriller, enmarcado en un mundo que parece sacado de alguna cinta noir y filmada con furia y enojo, mas allá de denuncia, al final el epilogo termina ganándole la batalla a uno.
Calificación: Bien