TRANCE (IDEM, REINO UNIDO, 2013)
En algún momento de la cinta la engañosa y escurridiza doctora hipnotista Elizabeth Lamb (Rosario Dawson) le restriega en la cara al desesperado mafioso Franck (Vincent Cassel) que la hipnosis no funciona para todos y que si quiere resultados tiene que esperarse a que prepare poco a poco el pastel, por supuesto que pareciera que Danny Boyle es el que nos esta diciendo estas palabras y que la hipnotista solo nos lo hace saber, las cintas de Boyle nunca han sido para todo el publico, ni sus premiadas cintas son tan "normales" como para ser disfrutadas por el respetable en general, solo aquellos a los que les agraden las locuras y aspavientos del director encontraran una nueva cinta que sumar a las correspondientes, y si algo tiene el cine de Boyle es que el elemento visual es muy importante, tanto como la historia y a veces más que la misma historia, de hecho esto sucede con este acercamiento al cine negro, al noir, que no es tanto una pieza del genero como una excusa de genero de ladrones donde Boyle de plano usa todos sus recursos visuales para deleitarnos y para mantener nuestra atención fuera de la historia que aunque interesante nunca termina de pegar.
Y es que como el buen hipnotizado uno tiene que estar de acuerdo en que lo engañen y pasar por alto multitud de detalles, algo que no es tan complicado debido a la excelente dirección de Boyle y la excelsa fotografía de Anthony Dod Mantle que nos deleitan en cada momento, que si alguna toma imposible desde fuera de un edificio acercándose al lugar de la sesión pasando el cristal de la ventana, que si alguno de los sueños locos que le encantan al director, la cámara estática mientras un protagonistas se queda estoico al verse timado, una toma larga siguiendo a cierto personaje, o una toma desfocada mostrándonos cierto fetiche de manera imaginativa, que si toma un espejo y luego al actor, los recursos que tiene Boyle son muchos y son usados correctamente para que no pensemos demasiado la historia que tiene algunos fallos, si se piensa con tranquilidad uno se da cuenta que no es creible y que siempre hace trampa, además los cinéfilos expertos de inmediato sabran de que va la cosa y como terminara lo que resta puntos pero que nunca estropea el viaje.
Simon Newton (James McAvoy, bastante bien e injustamente ninguneado) trabaja en subastas y nos explica como esta en asunto que termina en un robo donde sale golpeado de tal manera que sufre amnesia, al recuperarse es buscado por los ladrones con quienes resulta estaba confabulado porque la pintura se perdió en alhgun momento del atraco, Franck intenta todos los medios, la tortura, la platica y finalmente desesperado se va por la hipnosis, Elizabeth empieza a trabajar en Simon y se da cuenta de que algo extraño sucede y finalmente se alía con el mafioso con la promesa de hacer que Simon recuerde lo sucedido, siempre y cuando le toque un porcentaje decente, de aquí la historia es un vuelco de traiciones, de vueltas de tuerca, de recuerdos reprimidos, de miedos desatados, de sexualidad desatada, hasta que llegamos al final con tantas vueltas y sorpresas que uno no tiene tiempo ni de pensar, lastima que para los fanáticos del genero todo siempre se adivine desde antes, pero aun asi la delicia visual, las trampas del guion, la complejidad de los personajes, una banda sonora excelente, una fotografía exquisita y guiños y simbolismos al arte más puro y excelso hacen esta cinta una recomendación forzada.
Calificación: Bastante Bien
Simon Newton (James McAvoy, bastante bien e injustamente ninguneado) trabaja en subastas y nos explica como esta en asunto que termina en un robo donde sale golpeado de tal manera que sufre amnesia, al recuperarse es buscado por los ladrones con quienes resulta estaba confabulado porque la pintura se perdió en alhgun momento del atraco, Franck intenta todos los medios, la tortura, la platica y finalmente desesperado se va por la hipnosis, Elizabeth empieza a trabajar en Simon y se da cuenta de que algo extraño sucede y finalmente se alía con el mafioso con la promesa de hacer que Simon recuerde lo sucedido, siempre y cuando le toque un porcentaje decente, de aquí la historia es un vuelco de traiciones, de vueltas de tuerca, de recuerdos reprimidos, de miedos desatados, de sexualidad desatada, hasta que llegamos al final con tantas vueltas y sorpresas que uno no tiene tiempo ni de pensar, lastima que para los fanáticos del genero todo siempre se adivine desde antes, pero aun asi la delicia visual, las trampas del guion, la complejidad de los personajes, una banda sonora excelente, una fotografía exquisita y guiños y simbolismos al arte más puro y excelso hacen esta cinta una recomendación forzada.
Calificación: Bastante Bien