Tercera película del maestro Clint Eastwood y muy subvalorada, esta cinta esta casi olvidada y hasta los fanáticos de Eastwood no la conocen, o no se han dado la oportunidad de conocerla como una de las cintas menores del director para decir que no es indispensable, cuando Eastwood la hizo no se la quisieron distribuir debido a las exhibiciones de prueba que no fueron alentadoras, la cinta se enlato durante un año y cuando por fin se lanzo sin nada de publicidad en pocas salas le fue muy mal, Eastwood no estaba contento con la forma que trataron su cinta y acuso de esto al fracaso al que la obligaron, algo que todavía carga hasta la fecha porque como apunte arriba es una de la cintas más desconocidas del director, pero esta historia de amor entre un hombre maduro frio y duro y una hippie liberal, aniñada y alegre vale mucho la pena.
Edith Alice "Breezy" Breezerman (Kay Lenz, excelente en el papel de su vida) es una joven que vive dia a dia, no se si es correcta llamarla hippie aunque sus creencias si van por este camino, ama a los animales, ama todo lo que existe, busca la alegría en todo, en todo ve algo bueno, supone que Dios es el nombre para la conciencia del hombre y por supuesto tiene una gran libertad sexual, Breezy duerme donde puede aunque esto signifique que se aprovechen de ella, mientras que Frank Harmon (William Holden, excelente) se despide de una mujer esperando no volverla a ver después de pasar la noche con ella, es un solitario empedernido, se ha acostumbrado a ello pero no porque lo desee sino porque no se ha vuelto a enamorar después de terminar muy mal en su primer matrimonio.
Breezy se sube en el carro de un depredador sexual y apenas logra escapar y termina subiéndose en el carro de Frank, al tipo le llama la atención pero Breezy se separa de él llorando, aun asi la joven sigue yendo a visitarlo y conociéndolo, metiéndose en su vida a fuerza, pero después Frank lo agradece y se da cuenta de que Breezy lo ama, cosa que el todavía no acepta, pero que al final tendrá que aceptar por más que haya una abismal diferencia de edades, el es un hombre adulto, ella una adolescente, las diferencias sociales, el es un empresario con dinero, ella una hippie vagabunda, y la forma de pensar, él es pesimista, duro y arisco, ella es confiada, alegre y feliz, y asi se va ganando su corazón, entre tanto parloteo y sonrisas, lo mismo hace con nosotros, Breezy se gana nuestro cariño y aunque entendemos sus problemas y diferencias queremos que sean felices, a pesar de que se convierta en la comidilla de sus amigos y de que parezca un viejo rabo verde con crisis de edad, al final Frank decide darse la oportunidad de ser feliz, algo que aprendio de Breezy, pero ¿Quién no lo haría con una preciosidad como Kay Lenz que con esa soltura, frescura, desparpajo y juventud?
Calificación: Bien