CANIBALES (THE GREEN INFERNO, EU, 2013)
Eli Roth se ha especializado en cintas de terror violentas y gore con algun mensaje de por medio, sean los miedos de los gringos en "Hostel" o de los maridos infieles exitosos en su vida en "Knock Knock", aqui de nueva cuenta lo hace con el miedo a las tribus que viven al margen de la civilizacion como las conocemos pero tambien avienta su critica real, la que hace hacia las empresas que destruyen estas tribus y lugares para robar sus recursos naturales, una critica tan obvia en la cinta que se pierde por la falta de sutilidad, y justamente ahi es donde la cinta pierde fuerza, esa es la verdadera critica y no el hecho de que en la actualidad todavia hay lugares en los que practican actos tan barbaricos como cortarle los genitales a las niñas y seguimos sin hacer nada.
La cinta inicia bien con la siempre bella Lorenza Izzo como Justine, una aburrida estudiante universitaria que busca que hacer, su padre trabaja para la ONU y su compañera de cuarto esta en contra de todo, por lo que cuando conoce al guapo lider de los activistas de la universidad no duda en unirse, porque quiere con el chico claro, a pesar de que este la trate como basura (esa mania de las mujeres de amar a los patanes), aunque al final su deseo de acabar con injusticias como los rituales de mutilacion genital en africa la lleva a meterse de lleno en el asunto, van a la selva amazonica donde se enfrentan a los militares comprados por la compañia y logran parar la explotacion, pero apenas estan celebrando cuando su avioneta cae, y mas tardan en reponerse que ser atrapados por indigenas.
En la aldea sale todo a la luz, la avioneta fue averiada a proposito por la compañia que atacaron, el mafioso que los ayudaba trabajaba para la otra compañia y los activistas o por lo menos su lider solo ayudan a estas empresas mientras se hacen con fama y dinero, lo que sigue es ver como los canibales devoran a los activistas uno por uno, cocinados, desmembrados, algunos se suicidan, algo de humor negro con diarrea y algo tan inverosimil como drogar con marihuana a los lugareños metiendo una bolsa en un cadaver despues cocinado para que solo les de mas hambre y se coman a uno vivo, el problema es que al parecer este humor es involuntario lo que habla de los fallos que siempre carga Roth en sus guiones y al final la chica huye y nadie recibe su merecido, ni el patan lider activista que al parecer sobrevivio, ni las compañias con su ejercito mercenario, ni los indigenas que viven en la barbarie, y es que a final de cuentas Roth no se anima a atacar de manera decisiva, tiene miedo de ser politicamente incorrecto, no puede decir que hay poblaciones que no pueden vivir asi, ni que las empresas y activistas deben pagar, es tibio, como su final alargado que no se decide por nada. Un mal intento de "El Holocausto Canibal" que era mas valiente y con mayor mensaje, y mejor peliculas como entretenimiento tambien.
Calificacion: Palomera