AUDITION (IDEM, JAPON, 1999)
La obra maestra de Takashi Miike es una película que difícilmente se podría catalogar de redonda por todas las variantes y cambios que tiene, es una montaña rusa de emociones inclasificable que nos despierta tantas emociones que no queda mas que rendirse ante ella, y en efecto, la cinta es de terror porque al final es lo que predomina sobre lo demas y mas para uno que es hombre porque lo que sucede en el filme es la peor pesadilla de un hombre, el peor temor, lo que los mas idiotas no llegan a pensar a pesar de que se les viene encima, lo que los mas conscientes de vez en cuando sienten el escalofrió de que puede llegar a pasar, y no hablo literalmente sino de la libertad de las mujeres en un sentido real y no el que venden los medios, si llega esa libertad de pensamiento, ¿pagaremos por nuestros pecados? ¿pasados, presentes y futuros? pero lo mas interesante es que la cinta no se queda ahi, va mucho mas aya, toca temas tan delicados como importantes, las mujeres no son ni nunca han sido victimas completas, las sociedades exigen virtudes de un genero y al mismo tiempo le permiten defectos al otro, tanto de uno como de otro lado, al final la cinta tiene tantas lecturas y capas que cada quien puede salir con uno o varios significados.
La cinta comienza siendo un drama donde un niño lleva una maqueta deseando la recuperación de su madre, el inmediatamente vemos como la madre del pequeño muere dejándolo devastado tanto a el como a su padre Shigeharu Aoyama (Ryo Ishibashi, excelente) quien se dedica de ahi en adelante a su hijo y su empresa, pasan los años y el tipo es una persona intachable, amable, educado, exitoso, dedicado y serio, pero su hijo un día le suelta que debería buscarse una mujer si no quiere quedarse solo porque él ya sale con chicas, para este momento hemos dejado atrás el inicio de drama de la cinta y ya pasamos a una cinta de costumbre con el día a día, conocemos la cercana relación de Aoyama con su hijo Shigehiko (Tetsu Sawaki), a la parlanchina ama de llaves, las platicas con el quejoso productor Yasuhisa Yoshikawa (Jun Kunimura, muy bien) y con la gente de su trabajo que lo respeta y admira, su asistente mucho mas de lo normal y entendemos que ahi quizá sucedió algo que Aoyama quiere dejar atrás.
Después de ponernos todo sobre la mesa la cinta cambia de nuevo de piel, la idea de Yasuhisa para encontrarle esposa al exigente Shigeharu es tan rara como complicada, inventarse una audición para una película que no existe donde las cualidades de la protagonista serán las que busca el viudo, llegan muchas participantes y tanto la preparación como las audiciones son desternillantes, es decir estamos ante una inteligente comedia que nos hace tanto sonreír como soltar la carcajada, claro que tanto el protagonista como nosotros sabemos que la decisión esta tomada, ya ha escogido a la misteriosa Asami Yamazaki (Eihi Shiina, magnifica, tan perturbadora como fascinante) quien es preciosa, educada, seria, tímida, culta, cohibida y lo mas importante... dócil, es decir es todo lo que Shigeharu busca, lo que todo japones busca, lo que la mayoria de los hombres buscan de una mujer para relacion estable, y por ello el tipo no entiende de razones cuando su amigo le dice que la chica le da mala espina.
Para entonces ya estamos en otra cinta, una romántica donde Shigeharu invita a salir a Asami y se conocen, platican en restaurantes, en los taxis, por teléfono, ella siempre tan dócil y educada, el siempre tan galante y caballeroso, la historia del sueño quebrado de ella se gana totalmente la confianza de Shigeharu, nos emocionamos, esta impecablemente contada y dirigida, pero cuando tenemos la sonrisa de bobos enamorados algo mas se empieza a formar en nuestras mentes, algo no esta bien, las indagaciones de Yasuhisa nos hacen dudar, las escenas de Asami esperando la llamada con esa sonrisa que no conocíamos y un extraño saco detrás, la cinta de nuevo esta cambiando, ahora mas lento, nos regala una escena sexual diferente, casi intima, y una Asami desaparecida, Shigeharu la busca y empieza a descubrir cosas que le ponen la piel de punta, se encuentra con personajes extravagantes y enfermizos, asesinatos, desaparecidos, dedos y lenguas mutilados, un mundo de pesadilla en esa cinta de investigación, casi de cine negro, para dar paso a ese diabólico tramo final donde las alucinaciones pesadillescas, la solución de las incógnitas, la verdadera naturaleza de los personajes, todo se nos muestra de golpe, desaparecen las pieles de cordero y aparecen los lobos debajo y Miike nos entrega una de las escenas de tortura mas perturbadoras que recuerdo, no solo porque la entrega sin concesiones ni aspavientos, sin miedo a mostrar pero con la sabiduría de cuando no hacerlo, pero principalmente por toda el significado y la lectura que hay detrás de ella, y ademas nos regala dos locuras finales mas que resaltan aun mas el valor de la cinta, terror onírico que nos lleva casi a la locura junto a los protagonistas.
Y es que siendo sincero, uno nunca ve a Shigeharu como un depredador o una mala persona, es un ejemplo de vida y un modelo a seguir, pero ¿acaso no engaño a todas las chicas con la supuesta audición del titulo? ¿no pretendía seguir engañando a Asami por siempre? su finalidad era noble pero sus medios no, y ponía por encima sus deseos sobre todo lo demas, ¿no es justo que el sádico ángel femenino tome revancha? pero también tenemos el otro lado, Asami también miente, premedita todo, tiene una frialdad para esperar a ejecutar su plan que obviamente nada tiene que ver con la chica frágil que pretende vender, la sádica Asami es un villano pero también es victima, tanto de la vida con su madre y su horrendo padrastro como del enfermo maestro de ballet que la marco tanto física como mentalmente y que pago con la misma moneda, asi como los desaparecidos, todos son moralmente censurables y todos afectaron a la chica que ya es lo que odiaba antes, Asami ya no sabe separar el amor del dolor, tiene unos celos enfermizos, y la única manera en la que es feliz es siendo sádica, Asami es la muestra de todas las chicas japonesas que son quebradas, abusadas y subvaloradas en una sociedad donde los hombre mandan, donde las normas las rigen ellos, y donde ellas deben acatar todas las ordenes y deben cumplir los gustos para complacerlos, Shigeharu representa a todos los hombres que tienen temor aun a pesar de que no lo hagan con mala intención, abuso infantil, familias disfuncionales, engaños de la industria rompiendo la cuarta pared, los juegos de una pareja cual enfermiza muestra de como funciona una relación normal, y una escena que todavía me despierta por las noches, kirikirikir.... una majestuosa historia de Ryu Murakami llevado al cine por Daisuke Tengan y que
Takashi Miike nos muestra de manera perfecta, sin temor, sin buscar la aprobación del publico, sin concesiones, con una fotografía excelsa y una musica maravillosa, sin lugar a dudas la obra maestra de Miike y la muestra de lo maduro del cine oriental, donde hollywood habría hecho una comedia romántica sosa Japón nos muestra una tesis profunda e inteligente de las relaciones de pareja y las humanas de la manera mas enfermiza y bella posible.
Calificación: Excelente