Si la primera parte era insoportable hasta decir basta no se que esperaba encontrar en esta secuela, me deje llevar por el hecho de ser la más popular del catalogo de netflix y según las paginas de internet - pagadas supongo - un hitazo, así que pensé, ¿no puede ser tan mala como la anterior? quizá esta si tenga acción entretenida, no esperaba más, pero encontré mucho menos, la muestra de la calidad de esta película puede resumirse perfectamente en una escena, la de la pelea cuerpo a cuerpo de Andy (Charlize Theron con mirada perdida) con su amante abandonada Quynh (Veronica Ngo) que parece grabada a cámara lenta, pero la verdad es que la coreografía que peca de sencilla es realizada por las dos actrices con desgana, mecánicamente, como si dijeran uno tiro golpe aquí, ahora yo detengo puño, ahora estiro la otra mano, yo bloqueo mano estirada... pero todo lentísimo, sin emoción, sin esfuerzo, sin alma...
Justo como la trama que deambula de aquí para allá sin saber que hacer, de nueva cuenta los malos se hacen buenos, los buenos malos, y van chapulineando porque si, intentando dar dizque sorpresas en una historia que va de el equipo de la vieja guardia trabajando para la CIA - claro, porque los gringos son los buenos como notamos en la actualidad con sus políticas de guerra -, Andy ya no es inmortal pero ni falta le hace, los que la atacan lo hacen por turnos y aunque estén a su espalda descubierta mejor esperan a que se voltee y les suelte un fregazo, podrán ser delincuentes asesinos pero nunca deshonorables, el caso es que a Quynh la rescata la primer inmortal llamada Discord (Uma Thurman), la asiática regresa a reclamarle a su amor y es bateada de nuevo, solo que ahora no abandonada para sufrir eternamente, Discord prepara un rebuscado plan para exterminar a los inmortales ya que la ultima (Kiki Layne tan plana como en la primer cinta) puede quitarles la inmortalidad y luego estos traspasarla.
Algo que aprovecha Booker (desganado Matthias Schoenaerts) - que duro dos días exiliado - para perder su inmortalidad y pasarla a Andy, hombre tan sencillo que era y toda la película anterior se trato de esto, y así pasamos de una pésima escena inicial, a otras peores, mucho choros mareadores, vueltas sobre el mismo tema - que si las lesbianas están enojadas, que los gays se van a separar - donde a pesar de hablarse siempre de la importancia del tiempo lo pierden a cada momento, sale Henry Golding como recurso narrativo, y el final es horrible, un intento de cliffhanger que parece una tomadura de pelo porque durante casi dos horas no paso nada, y cuando sucede esta horriblemente filmado, mal escrito y torpemente actuado, con todo y enfrentamiento final de malo maloso estúpido, que se baja a pelear porque si, cuenta su plan con detalles - a lo mejor le manda email para aclarar más puntos -, y después de derrotarla la deja ahí para retarla a que la busque, ósea, un despropósito, y pensándolo bien, la Theron casi cumple una década sin una película decente, que alguien le diga que es actriz y no luchadora social.
Calificación: De Lo Peor del Año



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