Lucía (Ester Expósito dándolo todo físicamente, y con tremendo cuerpazo debo confesar) es una bailarina en un club nocturno del narcotráfico que de una deja de bailar, se dirige a un casillero, saca una maleta de adentro y se dispone a irse, no sin que un matón gigantesco (Fernando Valdivielso como cliché de musculoso sin cerebro) la increpe, primero casi como acoso sexual, después como violencia declarada, después de la violenta pelea la chica logra huir a duras penas, para dejar su automóvil abandonado junto con su celular destruido, es entonces cuando se dirige al edificio venus del título donde pide auxilio a su hermana Rocío (Ángela Cremonte) quien estaba a punto de huir a mitad de la noche con su adelantada hija Alba (Inés Fernández) porque "alguien" esta enojada según la pequeña Alba ¿quien esa persona? no tardaremos mucho en descubrir que si existe, ni tampoco quien es, aunque lo verdaderamente interesante es que desea.
Mientras esto sucede, los narcos afectados buscan desesperadamente lo robado, cercando el lugar y cerrando el área mientras interrogan a todos, por lo que Lucía esta atrapada en un lugar cercado y pobre de Madrid, sin posibilidad de que nadie pueda tenderle una mano, peor aun, su hermana desapareció dejándole a su sobrina sin decir ni pío, por lo que cada vez tiene menos opciones y más responsabilidades, para acabarla de amolar una supuesta sirvienta se le aparece en sueños a la pequeña, obligándola a hacer cosas contra su voluntad si no quiere que la asesine, o peor aun, que asesine a sus seres queridos, no pasara mucho tiempo para que los supuestos entes aparezcan en horribles pesadillas, con todo y regalo llegado aparentemente de la nada, sumado a que al parecer entes deambulan a sus anchas por el edificio casi abandonado y derruido.
Este solo es habitado por unas pocas personas, un par de señoras buena gente que le hacen una fiesta a una niña con limitaciones mentales, y una anciana líder (Magüi Mira robándose se impunemente cada escena en la que aparece), la canosa Marga no solo destila tranquilidad por todos lados con esa voz portentosa y segura, sino que parece leer y descubrir los pensamientos de los demás solo al verlos, una extraña sensación que queda desde su primer aparición. Es así que Lucía debe soportar a los demonios/fantasmas que la torturan, escapar de los narcos y descubrir la verdad de ese edificio con todo y extraños habitantes liderados por la segura y amable viejecita de rigor, al tiempo que cuida a su sobrina y descubre donde esta su hermana desaparecida.
En pocas palabras una historia del maestro Lovecraft - nada menos que "Los Sueños de la Casa de la Bruja" - traída a nuestra actualidad con toda la locura y excesos que representan al autor, y que por lo menos esta vez es respetada en sus excesos y desvaríos, terror cósmico que comienza con un terror humano, y que por más que temamos a los delincuentes sin conciencia, a los amantes traidores y las brujas sin alma, estos no son nada frente a los entes eternos y todopoderosos que imperan el mundo de Lovecraft, y para los que no somos más que microbios a su disposición, no es del todo lograda y tiene muchos defectos, pero siempre resulta interesante, incomoda y tenebrosa, que Balagueró de anime a saltar sin red de protección - con todo y limitaciones de presupuesto - de tal manera es algo a celebrar, aunque a la mayoría les moleste.
Calificación: Competente




No hay comentarios:
Publicar un comentario